La Federación Económica de Corrientes solicitó ante el Ministerio de Producción de la Nación, la revisión de la Resolución General AFIP Nº 848/00, que aplica un arancel de importación del 35% los equipos forestales (Forwarder), asimilándolos a un medio de transporte de carga que circula por rutas y caminos, como si fueran camiones de fabricación nacional, ya que además del mencionado arancel se exige la LCM (Licencia de Configuración de Modelo) para el control de seguridad.
Los equipos forestales (bajo posición arancelaria NCM 8704.23.90.220J), son vehículos autopropulsados para el transporte de troncos y rollizos, exclusivamente dentro de establecimientos forestales para trasladar el producido de la tala o raleo de bosques implantados, desde el lugar donde se encontraban en producción (en pleno campo) hasta un sector del establecimiento destinado al acopio de troncos o rollizos, antes de ser cargados en camiones para su destino final los aserraderos, exportación u otro destino.
Se trata de equipos con tres ejes y seis ruedas, tracción 6x6, propulsado por motores de 115 hp, equipado con grúa hidráulica de 7,2 tons. de capacidad, y peso total con carga máxima de aprox. 23.300 kgs. Puede decirse que en el ámbito forestal, el Forwarder es asimilado a un equipo de uso en actividades primarias, al igual que taladoras, Harvester (cosechadora forestal), arrastradores, autocargadores, tractores, acoplados, etc.
La FEC subraya en la nota, presentada ante el ministro Francisco Cabrera, que la Provincia de Corrientes es la principal productora nacional de madera implantada, contando con más de 500.000 has de pinos y eucaliptus que deben ser explotadas anualmente, en forma racional, ambiental y competitiva, parámetros que sólo se consiguen con estos equipos específicos para la actividad forestal, que agregan valor por la mano de obra calificada que se necesita para operarlos.
“La aplicación de un arancel de importación tan elevado, además de improcedente, hace que la adquisición de esta maquinaria sea de difícil alcance para los medianos productores, que deben recurrir a grandes empresas de servicios para este tipo de tareas. La ausencia del gravamen redundaría en una mayor demanda de estos equipos y una mejora en la competitividad, tal como ha ocurrido en países vecinos donde la alícuota de nacionalización es del 0%”, compara la entidad.
Cabe consignar que por el momento no existe fabricación nacional que compita con estos equipos -generalmente de origen nórdico- por el reducido número que demanda el mercado regional.
