Para el Gobierno, la modificación de las metas de inflación fue simplemente "correr en un año el objetivo de bajar la inflación a un dígito". El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, dijo: "Lo único que hicimos fue adaptar la trayectoria, pero nuestra meta permanente sigue siendo 5% para el 2020", según señaló en declaraciones que formuló a un grupo de periodistas entre los que estuvo ámbito.com en el Salón Scalabrini Ortiz del Palacio de Hacienda. El funcionario aseveró que el anuncio "refuerza la credibilidad y muestra también la coordinación que existen con las distintas áreas económicas".
En este mismo sentido se expresó el ministro de Finanzas, Luis "Toto" Caputo, al indicar que "en concreto, el único cambio que estamos haciendo que puede tener impacto genuino en la inflación, es haber bajado el financiamiento (del Banco Central al Tesoro) de 5 puntos en relación al PBI en el 2014/15, a 1 punto en 2018 y a 0,5 en el 2019".
A juicio del integrante del gabinete "esto genera previsibilidad y tiene impacto concreto y directo para el cumplimiento de la meta", estos cambios "deberían generar menores expectativas inflacionarias", aclaró el funcionario. Dujovne también enfatizó este concepto al señalar que "terminar con el financiamiento del Banco Central al tesoro genera previsibilidad y contribuye al cumplimiento de la meta de llegada del 5 por ciento de inflación".
Ambos funcionarios no dieron precisiones sobre el impacto que tendrán los aumentos previstos en las tarifas, aunque Dujovne recordó que "durante el gobierno anterior, con tarifas congeladas teníamos altos niveles de inflación", dando entender que el problema es fiscal.
También fueron evasivos al ser consultados sobre si está atrasado el tipo de cambio. "El dólar fluctúa" expresaron y recordaron que la Argentina cuenta con un "sistema de flotación cambiaria". Cabe indicar que había un cierto consenso en el seno del Gabinete en cuanto a que el atraso del tipo de cambio estaba complicando a vastos sectores de la economía. De hecho, durante diciembre el peso ya lleva una devaluación del 10% sin que haya habido intervención oficial.
El anuncio, según los especialistas, tiene también la intención generar un reacomodamiento del tipo de cambio para que luego baje a un valor en el orden de los 19 pesos, de acuerdo con especulaciones del mercado.
Respecto del anunciado objetivo del Banco Central de acumular reservas para alcanzar el 15% del PBI, el ministro de Hacienda afirmó que "se sigue manteniendo ese objetivo. Hoy, con 55.000 millones el Central tiene algo menos de 10 puntos del PIB. Los países emergentes suelen tener en el orden de los 20 puntos del PIB. Nosotros consideramos que sería deseable que el Banco Central tenga más reservas de las que tiene. Es deseable tener más pero a la vez hay que evaluarlo en el marco de los objetivos entre ellos el inflacionario", explicó Dujovne.
Sobre si el anuncio de cambio de meta representará en el tiempo una baja de la tasa de interés, el ministro de Finanzas insistió en que "las tasas relevantes para el arribo de las inversiones directas son las de financiamiento de mediano y largo plazo del tesoro. Y no la de política monetaria del BCRA", expresó Caputo. "Van a venir inversiones de más de 6 mil millones de dólares ¿alguno cree que están mirando la tasa del Banco Central?", se preguntó el ministro y se respondió: "Esta gente miran la tasa del soberano y estas tasas son las más bajas de nuestra historia, 4,5% anual promedio en el 2017", enfatizó el funcionario.
"No pensamos que el cambio de las metas se traslade a precios", fue la respuesta categórica de Dujovne ante la lógica pregunta sobre si no teme que el cambio de meta y la suba de la divisa impacten en los índices. "Es simplemente un reconocimiento de la inflación esperada, nuestra meta permanente es 5% para el 2020". Aunque luego aclaró que "es temprano todavía para ver un impacto agregado sobre todas las variables y en buena medida dependerá las medidas que tome el Banco Central que todavía no las conocemos".
Dujovne también afirmó que "tenemos una meta más realista que vuelve a actuar como un ancla más realista. Tenemos que ver cómo se implementa y a qué ritmo. Nosotros seguimos con la estimación presupuestaria de crecimiento del 3,5 PBI".
"¿Qué paso que se decidió cambiar las metas inflacionarias?", preguntó ámbito.com. "Una vez que ordenamos todo lo fiscal nos quedaba pendiente re adaptar las metas para que sean tan realistas y cumplibles como son los objetivos fiscales y de financiamiento", fue la respuesta del ministro.
Finalmente ambos funcionarios evitaron hacer precisiones en cuanto a si se modificará el tipo de cambio previsto en el presupuesto del 2018 como asimismo respecto a si este rebote no puede nuevamente generar carry trade.
Lo cierto es que Federico Sturzenneger tuvo que modificar sus metas de inflación a pesar que en sus conferencias de prensa siempre sostuvo que si lo hacía esto afectaría la credibilidad del Banco Central. El problema era que los mercados parecían no creerle por lo tanto de poco servía la suba de la tasa de interés.