El déficit comercial energético durante los primeros 11 meses del año alcanzó un saldo de - u$s 3.124 millones, lo que representó el 41% del déficit total de la balanza comercial argentina en el mismo período.
Así lo destacó el informe de Tendencias del Sector Energético del Instituto Argentino de la Energía (IAE), el que también resaltó que los subsidios energéticos acumularon una disminución del 35,5% en el mismo período.
El déficit comercial energético fue un 177,3% mayor en noviembre respecto del mismo mes de 2016, pasando de -44 a -122 millones de dólares, planteó el trabajo del Instituto que preside el ex secretario de Energía, Jorge Lapeña.
Así, el cálculo acumulado a los once meses de 2017 muestra un déficit 7,3% mayor al de igual periodo del año anterior pasando de - u$s 2.911 a -3.124 millones.
Esto implica que el déficit comercial energético acumulado a noviembre representa el 41% del déficit total de la balanza comercial argentina que alcanzó los -7.656 millones en los primeros once meses, según el Indec.
En cuanto a los subsidios energéticos, el informe detalle que en noviembre resultaron 17,7% mayores en términos interanuales pero acumula una disminución nominal del 35,5% en el período de enero a noviembre de 2017.
En este sentido, durante 2017 Cammesa recibió transferencia por $ 48.000 millones equivalente a un monto 52,7% menor al otorgado en el mismo periodo del año anterior.
El Plan Gas, en tanto, tuvo una ejecución acumulada a noviembre de 2017 de $ 21.903 millones siendo un 23,2% inferior respecto al recibido en igual periodo de 2016.
Al vincular los resultados de los subsidios energéticos y los niveles de importación, el informe planteó que mientras cae la producción de petróleo y gas se incrementa la demanda del mercado local.
"En un contexto de precios internacionales en recuperación, los precios internos tenderían a aumentar, y la solución a esta cuestión sólo puede hacerse por dos vías: aumentando los precios en el mercado interno o incrementando los subsidios a la demanda", alertó.
Así, mientras la producción doméstica de Gas Natural disminuye 0,9% en el acumulado a octubre de 2017 la demanda crece 0,6% en mismo periodo respecto al año anterior.
Esto implica que de mantenerse estos niveles de producción, con su tendencia ya declinante, el país continuará importando Gas Natural desde Bolivia y como GNL en iguales o mayores cantidades que al presente.
En el aspecto productivo de hidrocarburos, el Instituto precisó que la producción de petróleo disminuyó nuevamente en términos interanuales en octubre de 2017.
En ese mes, la disminución fue del 4,3% interanual acumulando en los primeros diez meses de 2017 una retracción del 7,2% respecto a igual periodo del año anterior.
Debido a las continuas disminuciones se observa un aumento en la tasa a la que disminuye la producción acumulada en los últimos 12 meses, siendo de 7,1% en el mes de octubre.
El informe alertó que en octubre la velocidad a la que disminuye la producción acumulada anual de petróleo se mantiene en niveles muy elevados y crecientes.
Respecto a la producción de Gas Natural también disminuyó en octubre con una retracción de 0,4% interanual, acumulando una disminución del 0,9% en los primeros diez meses de 2017 respecto a igual periodo del año anterior.
Adicionalmente, los datos referentes al acumulado de los últimos 12 meses muestran una disminución del 0,2%.