El costo de vida de los trabajadores registrados subió un 2,8% en octubre y se disparó así hasta el 42,5% en la comparación anual. El alza de precios resultó aún más elevada para los que menos ganan, según un indicador realizado por la CGT y CTA.
El impacto de la inflación en el bolsillo de los trabajadores en relación de dependencia (por encima de las paritarias) provocó una caída del 6,6% en el poder adquisitivo de los salarios.
La situación es más apremiante para los trabajadores que tienen salarios más bajos (cercanos el mínimo, vital y móvil) porque el costo de vida se les disparó un 48,8% en los últimos doce meses relevados.
El costo de mantenimiento de la vivienda se disparó un 14,3% mensual en octubre debido al impacto de la suba de tarifas, principalmente en las boletas que envían las distribuidoras de gas natural a la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
Así lo indicó este jueves el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET), iniciativa desarrollada por la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y el Centro de Innovación de los Trabajadores (CITRA), con apoyo del CONICET y más de 45 organizaciones sindicales.
La tarifa del gas registró un alza promedio del 239% mensual en octubre y lideró así el ranking, seguido por alimentos y artículos como el zapallo (34,4%), las alpargatas (29,1%), la carne (13,8%), entre otros. Este indicador mide la capacidad adquisitiva del salario en función de una pauta de consumo que es la que caracteriza a los sectores trabajadores en general y a cada subsector en particular.