El presidente del Banco Central de la República Argentina, Federico Sturzenegger, dijo que se observa un "crecimiento robusto y que puede ser fuerte" en función de los indicadores económicos que muestran que la economía creció en el segundo trimestre a una tasa del 4% anual y del 1% con relación al primer semestre.
"La gente está viendo un proceso de crecimiento sostenido", afirmó el funcionario. De acuerdo a la presentación del Programa Monetario correspondiente a julio se observa que para el Central se "consolida la reactivación" y que el factor de este crecimiento "es la baja de la inflación". Aunque también aumentó la inversión y la recuperación del crédito. En este sentido, señaló que hay "muy buena perspectiva para la inversión", ya que según los anticipos del BCRA la inversión se acerca a un pico histórico (tomando importación con producción de equipos).
El presidente de la autoridad monetaria sostuvo que "tras cinco años sin crecimiento económico, se ve un proceso de crecimiento sostenido" desde el primer trimestre de este año. Explicó que para el primer trimestre, "todos los componentes estaban creciendo".
La síntesis de la expectativa positiva del BCRA respecto al crecimiento se basa en tres datos: precios mayoristas en baja; expectativas inflacionarias ancladas y hacia la baja; y paritarias que recuperaron poder adquisitivo del salario. Estos datos son coincidentes con los que se manejan en la Casa Rosada que llevaron de optimismo al entorno presidencial.
Sobre el aumento del crédito, según indicó Sturzenegger, "ahora crecen más fuertes los préstamos para empresas que el de las familias". Explicó que los préstamos prendarios y personales crecen al 50% en tanto que en el último mes, el crédito comercial creció al 40%.
• Inflación
Respecto a la meta de la inflación que se ubica para este año en 12/17%, el titular del BCRA precisó: "Si vamos a cumplir con la meta de inflación de este año, necesitamos una inflación que esté claramente por debajo del 1% en el último trimestre, y para eso necesitamos tener una posición dura en términos de política monetaria que nos asegure que ese es el camino que la economía va a ir llevando adelante".
En buen romance esto quiere decir que el Central continuará utilizando el mecanismo de subir la tasa de interés en función de preservar el objetivo.
De hecho el titular del BCRA precisó que a mediados de 2016 cuando bajó la inflación también hubo una baja de tasas. En este sentido dijo que "la relajación de tasas quizás haya sido excesiva, y entonces desde principios de marzo empezamos a revertir un endurecimiento de política monetaria hasta este momento. Lo cual ubica al BCRA con la misma dureza monetaria de mediados del año pasado que nos permitió reducir muy significativamente la inflación en la segunda mitad del año pasado".
El año pasado hubo un pedido de otros sectores del gobierno nacional para que el Banco Central baje la tasa de interés ante el freno de la actividad económica. A regañadientes accedió Sturzzeneger y ahora se ocupa de recordar el efecto de esa medida.
El presidente del BCRA insistió en aclarar que "el BCRA vuelve al nivel de dureza que nos permitió llegar al nivel de 1,3% o 1,2%, y ahora volvemos a ese nivel de dureza arrancando de esos números. ¿Por qué? Porque si vamos a cumplir con la meta de 2017 y sobre todo si vamos a poner la inflación de forma consistente con la del año que viene, necesitamos una posición dura en términos del año que viene". Para el 2018 la meta estipulada es 10%, más menos 2 puntos.
"La mayor preocupación es la persistencia de la inflación núcleo", dijo y explicó que esta es la razón por la cual "nos ha conducido a endurecer la política monetaria en los últimos meses".
De acuerdo a los datos suministrados en el informe se observa que la inflación núcleo se mantiene en 1.3% a junio. "Para aquellos que pensamos que la inflación es un fenómeno monetario, creemos que el propio relajamiento de esa política monetaria fue el origen. Y la política monetaria actúa con rezago", reiteró el funcionario.
Reconoció que el aumento del combustible "terminó siendo más de lo que se hubiese pensado, que le dan una no linealidad al proceso de desinflación".
En la presentación en más de una oportunidad rescató que en el primer trimestre "la inflación bajó 15 puntos, del 36 al 21% por ciento".
Para cumplir la meta se deben bajar 4,7 puntos interanuales, y reconoció que "será más difícil" lograrlo que el proceso de desinflación del primer semestre.
Aunque son optimistas ya que "la inflación de mayoristas, que algunos lo toman como predictor, se está moviendo por el 12 o 14% interanual, por debajo de los minoristas", dijo Sturzeneger.
Cómo es habitual eludió la pregunta sobre el tipo de cambio al responder que "el tipo de cambio va buscando siempre su equilibrio".
Finalmente efectuó una recomendación a sus colegas: "A los economistas les sugiero replantear esas dudas sobre un BCRA duro en su objetivo de baja de inflación", concluyó Sturzzeneger.
Asistieron a la disertación el titular de la AEA, Jaime Campos, del sector de la construcción Juan Chediack y Gustavo Weiss, del sector financiero Jorge Brito Jr., Claudio Cesario, entre otros invitados.