Lo señaló Eulogio Márquez, Director de Defensa Civil de la provincia, quien participó de la reunión del Consejo Federal de Gestión del Riesgo y Protección Civil, desarrollada en la ciudad entrerriana de Paraná. “No hay peligro pese a la histórica bajante”, dijo el funcionario.
Con la participación de representantes de las Regiones NEA y Centro del país y la presencia del Jefe de Gabinete de Ministros, Santiago Cafiero, y de la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, el pasado martes, dio inicio en la ciudad entrerriana de Paraná el Consejo Federal de Gestión del Riesgo y Protección Civil. En la oportunidad, se trataron las dificultades de la bajante de los ríos de la región. Eulogio Márquez, Director de Defensa Civil de Corrientes, dijo que la provincia no corre riesgo con el suministro de agua.
En la apertura de las actividades, también estuvieron presentes la Vicegobernadora de la provincia de Entre Ríos, Laura Stratta; el secretario de Articulación Federal de la Seguridad de ese Ministerio, Gabriel Fuks; la ministra de Gobierno y Justicia de Entre Ríos, Rosario Romero; el subsecretario de Gestión del Riesgo y Protección Civil, Gabriel Gasparutti; y el intendente de Paraná, Adán Bahl.
Eulogio Márquez, dijo a época que se evaluó el contexto actual de sequía y la bajante de los ríos que lleva más de 2 años.
El funcionario provincial llevó claridad en lo que hace al suministro de agua potable en la provincia. “Corrientes cuenta con costas muy altas porque el canal del río pasa muy cerca de las costas. Esto provoca que las bombas de aguas estén colocadas bien, lo que permite que el suministro, hasta el momento, no corra riesgo”, enfatizó.
Márquez señaló que la ciudad de Resistencia, Chaco, ya está con algunos inconvenientes con las tomas del vital liquido.
“Si bien la tendencia habla de escasas lluvias hasta fin de año, no hay peligro de faltante de agua en Corrientes”, reiteró.
“Me parece interesante el planteo con respecto al trabajo cooperativo y coordinado que tenemos que hacer, no sólo en el marco del Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR), sino ahora que tenemos una situación tan compleja, con la bajante del río Paraná. Nosotros ya venimos trabajando desde hace semanas en una mesa en la que colaboramos y contribuimos con saberes y soluciones ante una situación muy grave como la que están sufriendo las provincias de la zona. Para nosotros es esencial avanzar en lo que planificamos y vamos definiendo estrategias en estas mesas”, comentó Santiago Cafiero, quien luego agregó: “El presidente declaró la emergencia hídrica en la cuenca del Paraná (Decreto 482/2021) y cristalizó el trabajo que se venía llevando adelante, que incluye obras de infraestructura y acceso al agua potable mediante un fondo hídrico de más de mil millones de pesos. Se avanza en la integración de políticas de cuidado y de fiscalización por parte de las fuerzas que están operando en la zona y en cuestiones relacionadas con la energía e instancias que se ven afectadas por catástrofes de estas características. El compromiso es avanzar allí donde surgen los problemas, sin mirar para otro lado, con una perspectiva federal y concreta, propia del trabajo articulado”.
Por su parte, y dirigiéndose hacia los representantes de las jurisdicciones participantes de este Consejo (Corrientes, Chaco, Formosa, Misiones, Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires), Sabina Frederic explicó: “Lo que nos reúne hoy es la necesidad de articular y coordinar las acciones de los ministerios nacionales y organismos a nivel regional, provincial y municipal, junto con las Organizaciones No Gubernamentales y de la comunidad para fortalecer y optimizar la reducción del riesgo de desastre, el manejo de la crisis y la recuperación para la asistencia a las poblaciones ribereñas, tanto en el río Paraná, como en su sistema de afluentes”.
Tras ello, la ministra agregó que “se trata de un trabajo que facilita la integración federal, tanto en la planificación como en la ejecución de los mecanismos adecuados para el empleo eficiente de los recursos humanos, materiales y financieros destinados a la atención y rehabilitación ante situaciones de emergencia o desastre”.