“No tenemos más nada que hacer en Corrientes. Perdimos todo y nadie nos ayudó”, dijo una productora forestal de Ituzaingó. Denunció que los recursos fueron dirigidos a zonas donde funcionarios tienen propiedades y campos.
Propietaria de una forestación perdió 3 mil hectáreas que fueron arrasadas por el fuego la semana pasada, llamas que alcanzaron el Paraje Galarza. Todo el distrito de la localidad de Ituzaingó.
“Había tres aviones hidrantes y helicópteros. Les di las coordenadas días antes, pero nadie hizo nada. Se quedaron con las coordenadas”, dijo Carina Lanaro.
“Tenían todos los aviones, helicópteros y brigadistas apostados en un country donde funcionarios provinciales tienen su casa de fin de semana”, señaló.
La mujer dijo que “en Corrientes no tenemos más nada que hacer” y que continuará con sus emprendimientos en la provincia de Misiones. Los campos de forestación que perdió son de su familia, las plantaciones de pino que se quemaron tenían 30 años de haber sido plantadas.
El éxodo de productores e inversores de Corrientes empezó y es otro efecto de los incendios en la provincia. Emigrarán por las pérdidas, pero también por la falta de atención y contención de las autoridades provinciales correntinas.
