Se trata de Jardines Maternales que están sin actividad desde inicios de la pandemia en marzo pasado. Reclaman poder volver a trabajar con protocolos como lo hacen la gastronomía y el turismo.
La última vez que tuvieron contacto con un funcionario provincial fue en junio pasado. “Estamos desesperados. Lo único que pedimos es volver a trabajar”, expresó a corrienteshoy.com la titular de la Cámara de Jardines Maternales, Marcela Romero.
La entidad nuclea a 18 jardines de toda la provincia que representan 400 puestos de trabajos de manera directa.
Lo más alarmante es que en plena pandemia y sin poder generar ingresos, “nos cortan los servicios esenciales como ser la energía eléctrica. A lo que debemos sumar el pago por la reconexión que es un plus, si no pagas no te reconectan”, dijo.
Al menos cinco instituciones en Corrientes capital “tuvieron ese problema y entendemos que no nos pueden cortar porque hay un Decreto Nacional que lo impide. No estamos trabajando, no podemos pagar los servicios básicos”, remarcó Romero.
Los jardines maternales atienden el cuidado de niños desde 45 días a 3 y 4 años. “Ya tenemos elaborados los protocolos de trabajo, podemos empezar a trabajar con padres que tiene trabajos esenciales y no tienen con quien dejar a sus pequeños”, relató.
Romero citó el “caso del Chaco que tiene una situación epidemiológica peor que la de Corrientes y ya habilitó el trabajo de jardines maternales”.
En septiembre pasado el Poder Ejecutivo provincial otorgó una ayuda económica a la entidad, “pero eso fue ínfimo. Llevamos más de siete meses sin trabajar y al ser no obligatoria nuestra actividad (lo es la educación primaria y secundaria), los padres dejaron de enviar a sus hijos y por eso la matrícula cayó abruptamente”, señaló.
Los servicios esenciales es una cuestión que el Gobierno provincial debería atender, esta semana la empresa concesionaria del servicio de agua potable, ejecutó un aumento superior al 50%. La actividad económica en Corrientes como en todo el país, está paralizada por la pandemia.
