El reconocido infectólogo correntino habló con República de Corrientes sobre el estado de la pandemia. Recomendó a la población tener actualizados los esquemas de vacunación.
La pandemia de coronavirus de este año es muy diferente de la que enfrentaba la comunidad en 2020 y 2021. Hoy, con el avance de la vacunación, el impacto es menor en la salud colectiva de la sociedad. No obstante, un factor ya no tan imprevisto sigue modificando las estrategias y encendiendo alarmas en los expertos de la medicina: las mutaciones y ahora, las submutaciones.
Esto es lo que ocurre en el mundo con la variante ómicron, la mutación que más sublinajes produjo hasta el momento. Las evidencias demuestran virus muchos más transmisibles que sus predecesores, pero menos invasivo en los infectados.
Desde que se inició la pandemia, en China en 2019 y en la Argentina en 2020 se sucedieron mutaciones de aquella cepa originada de Wuhan. Así apareció la gamma –conocida en un principio como de Manaos– y la delta, entre otras.
Las más perjudicial en el país fue esta última. Pero el verano pasado llegó una nueva: la ómicron y fue la responsable de saturar los sistemas sanitarios de todo el país por el récord de contagios que causó, lo que obligó a las autoridades a modificar el esquema de hisopados. En pocas palabras, se dejó de hisopar a personas que no eran consideradas de riesgo por el colapso que había en cada punto de diagnóstico.
Esta mutación (ómicron) es la única hasta el momento que siguió causando sublinajes, bautizados como BA.1 y BA.2, que aún no llegan al país, aunque lo harán pronto, según vaticinan.
El reconocido infectólogo correntino Fernando Achinelli habló con República de Corrientes sobre el estado de la pandemia. "Estamos en un momento de la pandemia en que tenemos que entender que este año está signado por las subvariantes. Esto significa que el virus original con su variante ómicron está generando nuevas subvariantes que están logrando infectar a gran parte de la población, haciendo un escape inmunológico, y, de esta manera, contagiar a los más vulnerables, que son las mayores de 50 años, todas las personas que tienen algún tipo de comorbilidades e inmunocomprometidos", explicó Achinelli.
Ante este escenario, indicó: "Si tenemos que hablar de las medidas de prevención, son fundamentalmente tres: las vacunas, en primer lugar; la cuarta dosis en los grupos de riesgo y la tercera en todos aquellos que no se han aplicado; los cuidados sanitarios que la sociedad ha aprendido a lo largo de estos casi 3 años".
"Es importante recordar el uso del barbijo en los ambientes cerrados, sobre todo en el transporte públicos, ámbitos laborales, educativos, ambientes donde haya aglomeración de personas, continuar con la higiene de manos y priorizar las actividades al aire libre", agregó.
Tras un alivio luego del verano, Corrientes, como el resto del país, experimenta un incremento de casos, lo que trae una consecuencia subyacente: una suba proporcional de las internaciones y también de los fallecidos.
El informe epidemiológico de ayer consignó 59 nuevos casos de coronavirus en Corrientes, de los cuales 41 fueron contagios en la capital y los 18 restantes en 11 localidades del interior provincial, al haberse analizado 1.095 muestras en las últimas 24 horas. Esto actualiza la cifra de casos activos en 323.
En tanto, el hospital de campaña confirmó ayer que 5 personas se recuperaron y recibieron el alta, mientras que una falleció por covid-19.
Hay 39 internados en la institución, de los cuales 34 permanecen en sala clínica general y todos estables, y 5, en la unidad de terapia intensiva, 4 de ellos con asistencia respiratoria mecánica. Todos están con pronóstico reservado.