Más de 11 mil personas en la Fiesta de Momo en Corrientes. Aseguran que con localidades agotadas culminó el tercer fin de semana de Carnaval. Sin dudas, grandes titulares que buscan impresionar a los lectores sobre la cantidad de gente que asistió a los corsos el sábado último.
El dato: dos localidades del interior con el 10% de habitantes que la ciudad Capital estuvieron por encima de esos números. Esquina, en la noche del 4 de febrero metió 14 mil almas en la avenida Hipólito Irigoyen, mientras que Monte Caseros con un corsodromo para 9 mil personas, orilló los 12 mil. La asistencia en los carnavales correntinos en la década del 70´, oscilaba entre las 50 mil a 70 mil personas, llegando a un pico de 100 mil en los 90. Era una locura total. En aquella época existían varios factores positivos, uno de ellos, era el lugar donde se realizaba por su cercanía, y la longitud de la pasarela de la avenida Pedro Ferré, donde se desarrollaba el desfile. Asimismo la pasión era absolutamente otra. Mucho tuvieron que ver los gobiernos conservadores del Pacto Autonomista-Liberal, que entre 1983 y 1991, sumado a los años de intervención federal de 1992 a 1993 que mataron al carnaval correntino y a sus comparsas. Se saltearon una generación y con ella, lo que parecía una eterna pasión que no dejaba de crecer. No tuvieron visión de turismo ni de futuro. Sencillamente no entendían nada de nada. Ahora con una estructura pequeña al lado del aeropuerto, sin accesos rápidos, ni transporte adecuado, la empresa concesionaría Ake Music, trata que la Fiesta de Momo sea multitudinaria para el inconsciente colectivo, pero aún le cuesta convocar.
El carnaval de Corrientes todavía no es una política de Estado, cuando lo sea, seguramente, se regresará al esplendor de los 70, el que debía ser el punto de partida.
