Los organizadores y trabajadores de eventos y fiestas se movilizaron por el centro de Corrientes para reclamar el retorno de la actividad.
Trabajadores y trabajadoras del sector de eventos volvieron a movilizarse ayer hacia Casa de Gobierno, para insistir por la reapertura de su actividad. Desde la Provincia advirtieron que la promesa de permitir fiestas en domicilios sólo se podrá cumplir cuando la ciudad vuelva a fase 5.
Unas 25 personas que integran la Asociación de Trabajadores de Eventos de Corrientes (Atrec) o entidades afines se movilizaron ayer por la ciudad, hacia la Casa de Gobierno, de manera de insistir con su pedido de habilitación del rubro en Capital. Se trató de la séptima marcha organizada por esta entidad, la cual partió desde la plaza Cabral con percusión y un carro de sonido.
El presidente de la Atrec, Eduardo Espínola, comentó ayer a El Litoral que en Casa de Gobierno fueron recibidos por el subsecretario de Iniciativa Privada y Gestión Administrativa, Raúl Nicolini. Según indicó, el funcionario les explicó que en tanto la ciudad no retorne a la fase 5 de la pandemia no podrán implementar la propuesta de retomar los eventos en los domicilios, según un protocolo armado.
“El próximo jueves nos va a recibir y dar noticias, si se vuelve a fase 5 se estaría habilitando lo que pedimos, así como la posibilidad de que se incluya música con DJ y bandas”, manifestó Espínola.
Vale recordar que en la Atrec vienen trabajando desde hace poco más de un mes con el Gobierno, para lograr la posibilidad de habilitar la celebración de pequeñas fiestas en hogares particulares, con un límite de personas y horarios que deberán ser coordinados con las autoridades provinciales y municipales. Además, deberá respetarse un estricto protocolo de bioseguridad que incluye el distanciamiento social, el uso de tapabocas y elementos de higiene.
“Dada la crisis económica, una reapertura sólo de salones dejaría sin trabajo a miles de proveedores de eventos, y sin la posibilidad a familias que no tienen poder adquisitivo para alquilar un salón”, había explicado Espínola a este medio.