El dictador bielorruso, Alexánder Lukashenko , de 70 años de edad y estrecho aliado de Rusia en su ofensiva contra Ucrania, seguirá otros cinco años más en el poder tras vencer con un apoyo del 87,6% en el paripé de elecciones que organizó este domingo en Bielorrusia. Así lo indica, según la agencia rusa TASS, un sondeo a pie de urna del llamado Comité de Organizaciones Juveniles de Bielorrusia. Este será ya su séptimo mandato desde 1994, con lo que lleva más de 30 años al frente del país.Y siempre aplicando mano de hierro, especialmente desde agosto de 2020, cuando también falsificó su reelección y estuvo cerca de ser derrocado por una revuelta que terminó aplastando sin miramientos y cuyas consecuencias se hacen sentir hoy con mayor intensidad que nunca.La oposición, con sus principales líderes en la cárcel o en el exilio, no ha podido levantar cabeza desde 2020 y la prensa independiente hace tiempo que está prohibida. De ahí la ausencia total de garantías que permitan validar los actuales comicios como legítimos, son un simple trámite fraudulento para que Lukashenko siga ocupando la Presidencia.Noticia Relacionada estandar Si Rusia firma con Irán un acuerdo militar como el que tiene con Corea del Norte Rafael M. Mañueco | Corresponsal en Moscú El tratado suscrito por los presidentes de ambos países, Vladímir Putin y Masud Pezeshkian, reforzará su cooperación en suministro de armamento, sobre todo drones, pero no se prevé el envío de tropas iraníes a la guerra de UcraniaLukashenko ha advertido que, a diferencia de 2020, está vez no habrá protestas. Por ahora, las únicas manifestaciones de repulsa se produjeron este domingo en Varsovia mientras tanto la Unión Europea como Estados Unidos han tachado de «farsa» las votaciones.La Comisión Europea rechaza que estos comicios puedan ser calificados de democráticos. La Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Kaja Kallas , subrayó este domingo en X que Lukashenko «carece totalmente de legitimidad» y lamentó que, sin duda alguna, «se proclamará de nuevo vencedor en otra farsa electoral». La líder de la oposición bielorrusa en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya , ha declarado que «nadie podrá dar por buenos los resultados» de estos comicios.Además del actual presidente, han concurrido otros cuatro candidatos, «compañeros de baile», como les llama incluso la prensa oficialista, que no oculta el papel de comparsa que representan. Son el jefe del Partido Liberal Democrático, Oleg Gaidukévich, el jefe de fila de los comunistas, Serguéi Sirankov, el presidente del Partido Republicano del Trabajo y la Justicia, Alexánder Jizhniak, y la empresaria y diputada independiente Anna Kanopátskaya, la única mujer en liza y la única que se ha permitido algunas críticas al sistema y que exige la liberación de los más de mil presos políticos que hay en las mazmorras del país.La organización de Derechos Humanos Viasna, vetada en el país por ser considerada «extremista» calcula que en Bielorrusia hay unos 1.250 presos políticos, incluso después de haber sido indultados más de 250 en los últimos meses. Muchos de los liberados estaban gravemente enfermos, tenían avanzada edad o estaban cerca del final de sus condenas. Sin embargo, dirigentes opositores de primer orden, como Serguéi Tijanovski, marido de Tijanóvskaya, Valeri Tsepkalo, Ales Bialiatski, María Kolésnikova o Víctor Babariko, siguen en prisión.Prisión o exilio para la disidenciaDurante la rueda de prensa que ofreció tras acudir a depositar el voto en compañía de su perro, Lukashenko fue instado a admitir que poco tienen de democráticos unos comicios cuando la oposición se encuentra en la cárcel o en el extranjero. Respondió que «optaron libremente, algunos eligieron la prisión otros el \'exilio\', como usted dice, aunque no expulsamos a nadie del país». También negó que se persiguiera a quienes hablaban de la situación en Bielorrusia afirmando que «hubo cárcel para las personas que abrieron la boca demasiado, para decirlo sin rodeos, aquellos que violaron la ley». Aseguró también que le importa poco «que Occidente reconozca o no el resultado de las elecciones (…) aquí no va a cambiar nada por eso».Pero, para impedir posibles protestas en los próximos días, desde el sábado, se han empezado a bloquear numerosas páginas de Internet y los VPN. Existe la amenaza de que, en caso de que se produzcan intentos movilizadores, Internet quede completamente inaccesible. No ha habido prácticamente campaña electoral alguna. Lukashenko dijo que no participaría en ningún debate electoral por «falta de tiempo» ante los numerosos asuntos de Estado que supuestamente reclaman su atención. Para impedir posibles protestas en los próximos días, desde el sábado, se han empezado a bloquear numerosas páginas de Internet y los VPNÉl fue uno de los pocos diputados que votó en contra de la independencia de Bielorrusia en 1991. Hasta aquel momento había dirigido un \'Sovjoz\', cooperativa agraria comunista, cerca de la ciudad de Mogiliov, junto a la frontera con Rusia. Tras ser elegido diputado, el antiguo responsable agrario fue puesto al frente de un comité anticorrupción, que le hizo ganar popularidad.Venció por primera vez en unas presidenciales en 1994 bajo la bandera de la unión con Rusia, con el objetivo declarado de restablecer algo parecido a lo que fue la URSS. Nada más llegar al poder, Lukashenko restableció la vieja bandera de la Bielorrusia soviética y muchos otros símbolos e instituciones del antiguo régimen comunista, incluido el denostado KGB.