Una investigación israelí sobre el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre de 2023 publicada este jueves reconoce un «completo fracaso» del Ejército de Benjamín Netanyahu para prevenir el asalto, que causó más de mil muertos en el país, según ha declarado un responsable militar y recoge la agencia de noticias AFP.« El 7 de octubre fue un completo fracaso . El Ejército israelí no cumplió su misión de proteger a los civiles», ha declarado este responsable bajo condición de anonimato, con motivo de la publicación de las principales conclusiones de esta investigación.Y añade: «Ese día murieron demasiados civiles preguntándose [...]donde estaba el Ejército«. En este sentido, la investigación reconoce que las Fuerzas Armadas p ecaron de «exceso de confianza» y habla de conceptos erróneos sobre las capacidades militares de Hamás.Noticia Relacionada estandar No La negativa de Israel de retirarse del corredor de Filadelfia pone en peligro la tregua con Hamás C.Pérez «No nos retiraremos de la ruta Filadelfia», dice un funcionario israelí según los medios del paísEl Ejército israelí no pudo «imaginar un escenario» como el del 7 de octubre de 2023, ha detallado este alto mando, que ha agregado que los militantes palestinos liderados por Hamás cogieron a Israel por sorpresa, no solo en términos de tamaño y escala del ataque, sino también por su «brutalidad».La percepción de que Hamás no estaba interesada en un conflicto a gran escala y de que Israel tendría una amplia advertencia si eso cambiaba permaneció incontestada durante años, según el resumen, lo que resultó en una falta de preparación y capacidad para responder a un ataque.«La creencia era que se podía influir en Hamás mediante presiones que redujeran su motivación para la guerra, principalmente mejorando las condiciones de vida en la Franja de Gaza», dice el informe.La investigación ha analizado la estrategia militar israelí, el comportamiento en combate y la inteligencia antes, durante y después del 7 de octubre de 2023, cuando combatientes de Hamás asaltaron el sur de Israel, mataron a 1.200 personas y tomaron más de 250 rehenes , según los recuentos israelíes.