Italia reanuda el traslado de inmigrantes a los centros de Shengjin y Gjader en Albania después de una interrupción de casi dos meses. La nave Cassiopea, de la Marina Militar, partió de las aguas de la isla de Lampedusa con 49 inmigrantes rescatados en el Mediterráneo por patrulleras italianas. En los dos traslados anteriores -en octubre y noviembre del año pasado- los jueces de inmigración del Tribunal de Roma no validaron el traslado de los inmigrantes a Albania , alegando que no podían ser repatriados a sus países de origen porque no reunían garantías de «seguridad».Algunos procedían de Egipto y Bangladesh, naciones que, según varios magistrados y organizaciones de derechos humanos, no se ajustan a la definición de Estado seguro exigida por la normativa comunitaria. Los jueces de inmigración ordenaron que los inmigrantes debían regresar a Italia; en total, solo dos decenas de personas en las dos primeras operaciones. En diciembre, el Tribunal Supremo estableció que la definición de países seguros «es responsabilidad exclusiva del Ministerio de Asuntos Exteriores y de los demás ministros que intervienen concertadamente». Según la sentencia del Tribunal, corresponde a la política «evaluar cualquier circunstancia específica» que pudiera generar riesgos específicos para el solicitante de asilo individual si regresa a su país de origen. Esta sentencia ha sido determinante para que el Gobierno Meloni haya reanudado las operaciones de envío de inmigrantes a Albania .Noticia Relacionada estandar No Italia vuelve a envíar a 49 migrantes a los centros de detención de Albania ABC «¡Los centros en Albania fun-cio-na-rán! Aunque tenga que trabajar cada noche hasta el final de mi gobierno», avisó MeloniEl Ejecutivo no ha querido ni siquiera esperar al pronunciamiento que realizará sobre el caso el próximo 25 de febrero el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Las prisas del Gobierno tienen dos motivaciones fundamentales: Por una parte, se han incrementado las llegadas de inmigrantes a Italia en los últimos días; por otro lado, se ha tenido en cuenta el contexto internacional: el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, inició expulsiones masivas, mientras la vicepresidenta y comisaria croata Dubravka Šuica, de visita en Roma, ha elogiado la iniciativa italiana. «El proyecto Italia-Albania es una solución innovadora que estamos estudiando para la directiva de repatriación», afirmó la comisaria Dubravka Šuica. Unos quince países de la UE apoyan la iniciativa del Gobierno Meloni . Muy crítica se muestra la oposición italiana. «Ese loco de Trump está dando la razón a la derecha europea, con la terrible foto de los inmigrantes encadenados subidos a un avión », ha dicho Elisabetta Piccolotti, de la Alianza Verde Izquierda. La mayor crítica que se hace al Gobierno es el coste de los dos centros en Albania, por los que pasarán cada año unos 36.000 inmigrantes: unos 800 millones de euros en 5 años.
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