Este fin de semana ha sido uno de los peores en la guerra entre Hizbolá e Israel en cuanto a víctimas mortales. El sábado, el Ministerio de Salud libanés cifró en 84 los fallecidos por ataques israelíes y este domingo fueron cerca de una treintena. Con estos números, Líbano eleva ya a 3.790 los muertos y 15.626 los heridos desde el estallido del conflicto entre la milicia libanesa y las fuerzas israelíes a las pocas horas de comenzar la guerra de Gaza, el 7 de octubre de 2023. Del lado israelí, las autoridades dicen que al menos 82 soldados y 47 civiles han muerto en la contienda contra Hizbolá. Los ataques sobre Líbano en los últimos días se están centrando en la capital, Beirut, y no sólo en los suburbios del sur, donde parece tener Hizbolá instalaciones de almacenamiento de armas y búnkeres utilizados por el ala militar del grupo. La ciudad también está siendo golpeada en el centro, destruyendo edificios y dejando a la capital otra vez entre las ruinas.Beirut sufrió en la guerra de 2006 un colapso económico del que aún no se ha recuperado; en 2020, una explosión en el puerto destruyó gran parte del centro de la ciudad. Ahora, el último conflicto entre Israel y Hizbolá está arrastrando a la urbe de nuevo a un ciclo de violencia, justo cuando estaba empezando a estabilizarse después de años de caos.Más de 320 edificios destruidosLos bombardeos han destruido 325 edificios de Beirut, incluidas estructuras residenciales y comerciales, en un período de 30 días, según un estudio publicado por el Laboratorio Urbano de Beirut de la Universidad Americana de Beirut y recogido por \'The Wall Street Journal\'. Los últimos ataques se produjeron cerca del aeropuerto y de hospitales que se encuentran cerca de barrios donde Israel afirma que Hizbolá esconde su infraestructura militar y administrativa. El conflicto también ha causado daños por 8.500 millones de dólares, según el Banco Mundial, casi la mitad de la producción económica anual del Líbano, que ya se había desplomado tras una crisis financiera que comenzó en 2019.Como respuesta a los ataques de las fuerzas israelíes, este domingo la milicia libanesa lanzó una andanada de cohetes a territorio israelí. \'The times of Israel\' publicaba en su web que hasta 250 cohetes fueron lanzados al norte y centro de Israel en varias salvas a lo largo del día, dejando una decena de heridos y varios edificios destruidos. Aunque parecía que la posibilidad de un alto el fuego estaba cerca, los últimos acontecimientos no dicen lo mismo.A principios de esta semana, el enviado especial de Estados Unidos, Amos Hochstein, dijo en el Líbano que un acuerdo de tregua estaba «a nuestro alcance», y luego se dirigió a Israel para mantener conversaciones con funcionarios allí.Este domingo, el principal diplomático de la UE, Josep Borrell, pidió un alto el fuego inmediato en la guerra entre Israel y Hizbolá durante una visita al Líbano, mientras el grupo militante se atribuía ataques en el interior de Israel. En la capital libanesa, Borrell mantuvo conversaciones con el presidente del parlamento, Nabih Berri, quien ha liderado los esfuerzos de mediación en nombre de su aliado Hizbolá. «Sólo vemos un camino posible: un alto el fuego inmediato y la plena aplicación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (que puso fin a la última guerra entre Hizbolá e Israel de 2006)», afirmó Borrell. «El Líbano está al borde del colapso», advirtió.