El mes pasado salió a la luz un vídeo que mostraba las condiciones infrahumanas en las que malviven los 15.000 reclusos que ocupan la macro cárcel de Makala (con capacidad real para 1.500 presos), en Selembao, municipio de Kinsasa, la capital de República Democrática del Congo (RDC) . El autor de la grabación y filtración de esas imágenes es el periodista Stanis Bukajera , condenado por la Justicia de RDC a seis meses de prisión en Makala, acusado de falsificar un documento que vincula a la Inteligencia congoleña con el asesinato de Chérubin Okende , portavoz del destacado partido del opositor Moise Katumbi.La rápida viralización del vídeo ha tenido un fuerte impacto en la opinión pública y el Gobierno congoleño, que ha anunciado recientemente que 527 presos de la Prisión Central de Makala, han sido puestos en libertad condicional en una medida excepcional dictada por las autoridades para intentar rebajar la presión sobre las cárceles, que se encuentran por encima de su capacidad.Noticia Relacionada estandar Si Los autores del fallido golpe de Estado en la República Democrática del Congo podrían enfrentar la pena de muerte Gabriel González-Andrío Entre los detenidos hay tres soldados estadounidenses, ha señalado el portavoz de las Fuerzas ArmadasEs la segunda oleada de liberaciones en esta cárcel. Varias organizaciones civiles han denunciado que la prisión de Makala es una «trampa mortal» para quienes son enviados a ella y se ha informado recientemente de varias muertes dentro de sus muros.Dormir en el sueloLos destinatarios de la medida de gracia han participado en una ceremonia oficial en la que han prometido al ministro de Justicia, Costant Mutamba , que no reincidirán en sus delitos.«Vivimos en condiciones inhumanas . Apenas comemos. No hay agua, ni siquiera para lavarse. Tenemos que ayudar a los que se quedan», ha declarado uno de los presos liberados. Otro señala que dentro de Makala «hay muchos enfermos, pero no pueden obtener los medicamentos, ya que no hay ningún médico que realice las consultas«.Ante la avalancha de críticas , el Ministerio de Justicia de RDC ha comprado más de 2.000 colchones para la prisión, aunque lo previsto eran unos 7.000. «Las camas están en proceso de fabricación, así que la semana que viene no habrá ningún preso que tenga que pasar la noche en el suelo», señaló Mutamba, cuyo Ministerio trabaja ya en la rehabilitación del dispensario de la prisión y de varios pabellones. «Queremos aliviar la congestión y reducirla a la mitad y después rehabilitarla desde los cimientos», ha añadido.La situación en otras prisiones del país no es mucho mejor. Recientemente 24 presos han sido puestos en libertad en la Prisión Central de Kisangani y dos más en el Centro de Detención de Osio , en la provincia de Tshopo, también para rebajar la sobreocupación. En la cárcel de Kisangani sobreviven 1.100 presos, más del doble de la capacidad de las instalaciones. Uno de los voluntarios sociales que trabajan en el interior de Makala (y que prefiere mantener el anonimato) explica a ABC que «la situación actual de la cárcel de Makala es desastrosa, invivible. Se construyó en la época colonial para 1.500 personas y ahora alberga unas 16.000 , así que se pueden imaginar cómo viven. Los presos están hacinados en pabellones donde no hay aire y a menudo tampoco agua, permanecen varios días sin lavarse, etc. Además, todos los días hay muertos en el pequeño centro de salud«. »Nuestro trabajo consiste en llevar cada semana comida, ropa, vendas y medicinas para curar muchas llagas, pero es como una gota en un océano de necesidad», apunta.Corrupción y muertos«De esta multitud de presos –añade– unos 5.000 son condenados: los otros dos tercios están en prisión preventiva, a la espera de juicio, y es entre ellos donde se produce el mayor número de muertes. Hay presos que permanecen meses y años antes de ser oídos por primera vez; tal vez sean inocentes. ¿Y por qué? Hay graves retrasos en el proceso judicial, o porque se incendió una sala de policía que contenía tantos expedientes... que se quemó todo, etc. La realidad es que la Justicia es muy lenta en el proceso de excarcelación de presos y la corrupción hace estragos. Desde hace más de un mes hay un nuevo ministro de Justicia que parece dispuesto a excarcelar presos y desahogar la prisión».«El Gobierno es consciente de esta escandalosa situación y propone trasladar a los presos a otras prisiones donde haya espacio. Tiene planes para construir una nueva prisión, pero quién sabe cuándo llegará ese momento. Lo más factible hoy es liberar a los presos», explica.Curiosamente, la prisión catalogada como la más peligrosa del mundo se encuentra al otro lado de la frontera noreste de RDC., en Ruanda. Se trata de la Prisión de Gitarama . Fue diseñada y fabricada para unos 400 presos, pero en estos momentos el centro supera los 8.000 reclusos. Cada preso tiene menos de 0,5 m² para vivir. Cada día hay decenas de muertos y son habituales las reyertas con armas entre la población reclusa. El centro penitenciario está formado por dos edificios de cuatro plantas cada uno.