A poco más de un mes para la toma de posesión de Donald Trump todavía se desconocen las principales líneas de su plan para Ucrania. El republicano aseguró que su intención era acabar con la guerra -en menos de 24 horas- y deslizó la posibilidad de reducir la ayuda a Kiev mientras defiende que no abandonará al país invadido por Rusia. Michael Waltz , designado por el presidente electo de Estados Unidos como su asesor de Seguridad Nacional, ha señalado que el equipo de Trump busca un final claro para la guerra europea. «¿Cómo ponemos fin a este conflicto? ¿Cómo lo hacemos de una manera que restablezca la estabilidad, detenga la masacre y, con suerte, haga de esto un final permanente, no solo una pausa? Esas son todas las cosas en las que estamos pensando», manifestó Waltz en una entrevista con CBS el pasado domingo. El próximo inquilino de la Casa Blanca, en palabras de su asesor de Seguridad Nacional, está preocupado por la «carnicería que está ocurriendo» en los frentes ucranianos. Waltz definió el conflicto como «una trituradora de seres humanos»: «una guerra al estilo de la Primera Guerra Mundial». Otra de las cuestiones a la que respondió el miembro de la futura Administración Trump se refiere al uso de armas estadounidenses contra territorio ruso. El presidente electo declaró que se opone «firmemente» a esto. Y Waltz añadió que un «cheque en blanco no es una estrategia», refiriéndose al enfoque del Gobierno de Biden de entregar material y permitir este tipo de ataques. La posición oficial de las autoridades ucranianas es colaborar con el nuevo equipo presidencial de Estados Unidos para poner fin a la guerra «desde una posición de fuerza». Zelenski ha mencionado la posibilidad de recuperar los territorios ocupados mediante la diplomacia en un cambio de discurso general de Kiev desde la victoria de Trump.Noticia Relacionada estandar Si Ucrania registra más de 2.000 casos de intoxicación química en soldados desde el inicio de la guerra Miriam González El coronel ucraniano Artem Vlasiuk confirmó el empleo de gases «no identificados» por parte de Rusia y advierte sobre la falta de tecnología en el Ejército ucraniano para reconocerlosLa viceprimera ministra para la integración europea y euroatlántica, Olha Stefanishyna , destacó la importancia de la reunión trilateral de París entre Emmanuel Macron , presidente de Francia, Trump y Zelenski. «Creo que después de la reunión (trilateral) que tuvo lugar hace unas semanas en París, podemos contar con cambios históricos bastante significativos. El fin de la guerra, el proceso de paz, los acuerdos de paz nunca son sencillos… todos los ucranianos deberían darse cuenta de que no se tomará ninguna decisión que no redunde en interés de Ucrania», dijo la ministra ucraniana.Rusia mantiene la presión en el frenteEl cambio de enfoque de la presidencia de Trump respecto a Ucrania es un hecho. Mientras las capitales aliadas abordan la perspectiva de una salida diplomática a la invasión a gran escala, la guerra sigue su curso en Ucrania. El Estado Mayor del país informó que las pasadas veinticuatro horas se produjeron 228 enfrentamientos militares en el frente. Los combates más intensos se situaron en la región oriental Donetsk, parcialmente ocupada por Rusia desde 2014. Las fuerzas de Moscú mantienen su presión en los sectores sur esta región, principal objetivo del Kremlin. El Instituto para el Estudio de la Guerra informó de avances rusos cerca de la estratégica ciudad de Pokrovsk, un enclave fundamental para la logística del Ejército Ucraniano. Las tropas de Putin se encuentran a menos de tres kilómetros de la urbe y han avanzado recientemente. La situación es complicada para los defensores, superados en número por las fuerzas enemigas. En la localidad de Siversk, ubicada también en la región de Donetsk, los rusos lanzaron un asalto mecanizado el pasado sábado. Según el periodista ucraniano Yuri Butusov la operación fue preparada cuidadosamente en comparación con otras similares en la zona y participaron «400 efectivos, hasta 30 vehículos blindados, 13 buggies y 60 motocicletas». Los defensores ucranianos pudieron repeler la intentona enemiga de penetrar en sus líneas defensivas. El Instituto para el Estudio de la Guerra, con base en Estados Unidos, destacó que el tipo y organización de la maniobra «indica que las fuerzas rusas parecen estar aprendiendo a realizar asaltos más efectivos, pero aún están lejos de restablecer la maniobrabilidad en el campo de batalla».Además de los combates en el frente, las ciudades de la retaguardia ucraniana también sufren las ofensivas aéreas rusas casi a diario. La pasada noche el ejército de Moscú disparó 49 drones kamikaze contra varias regiones del país. La Fuerza Aérea logró derribar 27 aparatos y 19 de ellos no alcanzaron sus objetivos gracias a las contramedidas de guerra electrónica. Las autoridades regionales informaron que durante la pasada jornada al menos seis civiles resultaron heridos.