El líder de Fianna Fáil, Micheál Martin , fue elegido Taoiseach (primer ministro irlandés) por segunda vez este jueves, después de que se disipara el caos que había envuelto al Dáil, la cámara baja del Parlamento irlandés . La sesión del miércoles estuvo marcada por tensas confrontaciones entre los partidos del gobierno y la oposición, lo que llevó a varias suspensiones del debate.Martin, uno de los parlamentarios con más años de servicio, fue elegido por primera vez en 1989 como representante de Cork Sur Central. Ya había ocupado el cargo de Taoiseach entre 2020 y 2022, y ahora lo ejercerá nuevamente hasta 2027, cuando se espera que el líder de Fine Gael, Simon Harris, asuma la jefatura del gobierno.El proceso de elección de Martin no fue sencillo. El Dáil fue suspendido varias veces tras un enfrentamiento entre los partidos del gobierno, encabezados por Fianna Fáil y Fine Gael, y la oposición. Los problemas surgieron cuando se planteó permitir que los diputados independientes que apoyan al gobierno se sentaran en los bancos de la oposición. Esto generó indignación, especialmente en Sinn Féin, que se opuso a que estos parlamentarios tuvieran derechos y tiempo de intervención propios de la oposición, a pesar de su apoyo al gobierno.Noticia Relacionada estandar No Aplazada la votación del primer ministro de Irlanda tras disputas de los parlamentarios por los tiempos de debate ABC Este jueves por la mañana vuelve a reunirse el Parlamento: «Es la primera vez, creo, en más de 100 años, que el Dail no logra elegir un gobierno y cumplir con su obligación constitucional», ha afirmado el candidatoFianna Fáil y Fine Gael se han comprometido a formar un gobierno conjunto tras las elecciones de noviembre, en las que fueron los dos partidos más grandes, aunque con el apoyo de un pequeño grupo de diputados independientes, ya que la representación del Partido Verde se redujo considerablemente. Por su parte, Sinn Féin sigue siendo el mayor partido de la oposición con 39 escaños.El debate se intensificó cuando los diputados independientes solicitaron formar un «grupo técnico» con el fin de obtener tiempos de intervención y otros derechos de la oposición. La presidenta de la Cámara, Verona Murphy, permitió provisionalmente que este grupo ocupase sus asientos originales, pero no sin antes recibir fuertes críticas de los otros grupos opositores, que acusaban a los independientes de querer estar en el gobierno y la oposición al mismo tiempo, restando tiempo a quienes buscan una mayor fiscalización del ejecutivo.La disputa continuó durante todo el miércoles, con múltiples intercambios de palabras y suspensiones de la sesión. Finalmente, la elección de Taoiseach fue pospuesta tras un enfrentamiento verbal entre los diputados. No fue sino hasta el jueves cuando Murphy dictaminó que los diputados independientes no obtendrían el estatus de grupo opositor, lo que calmó temporalmente las aguas. El Sinn Féin elogió la decisión, y su líder, Mary Lou McDonald, dijo que el gobierno finalmente reconoció la necesidad de una distinción clara entre gobierno y oposición.El caos en el Dáil fue calificado por Harris como un «espectáculo absurdo» y una tentativa de «obstruir y descalificar» el proceso constitucional. Por su parte, Martin acusó a la oposición, en especial a Sinn Féin, de orquestar una «posicionamiento premeditado, coordinado y coreografiado» para obstruir la elección.En su discurso de aceptación, Martin lamentó la creciente polarización y agresividad en los parlamentos a nivel mundial, y destacó que los debates deberían ser un espacio de desacuerdo respetuoso y constructivo. Asimismo, recordó a su padre, Paddy Martin, en el aniversario de su fallecimiento, subrayando la influencia de sus valores en su carrera política.A pesar de los desacuerdos, el proceso avanzó y, tras recibir el sello de su nombramiento por parte del presidente Michael D. Higgins, Martin regresó a Leinster House para formar el nuevo gabinete. Este contará con 15 ministros y 23 ministros junior, con un programa de gobierno que fue aprobado recientemente por Fianna Fáil y Fine Gael. En este acuerdo, ambos partidos descartaron a Sinn Féin como socio de coalición, una decisión que McDonald criticó.