La cultura actual esta llena de falacias que prometen la felicidad y nos mandan al lugar equivocado. Pero la ciencia de la felicidad avanza y clarifica el camino para ayudarnos a disfrutar más y mejor de la vida. En la Universidad de Harvard y en la Universidad de Bristol se encuentran 3 de los mayores expertos en felicidad del mundo: Arthur Brooks, Robert Waldinger y Bruce Hood. Son ellos, precisamente, los que dan la vuelta a tres hábitos erróneos que mucha gente practica sin saberlo y que están les están impidiendo ser felices con la vida que tienen. Ellos mismos los explican.
3 hábitos que te están impidiendo ser feliz hoy mismo
Repasamos 3 hábitos erróneos que te están impidiendo ser feliz (elegidos los mejores expertos en felicidad del mundo):
Elegir siempre el camino que te exige menos esfuerzo
"Las emociones y experiencias negativas o desagradables nos dan la resistencia que necesitamos para fortalecernos. Una estrategia de evadir las fuentes de sufrimiento no es una forma de vivir plenamente. Incluso si fuera posible, obstaculizaría nuestro desarrollo como seres humanos y reduciría nuestra satisfacción con la vida", dice el experto en felicidad de la Universidad de Harvard Arthur Brooks. "La satisfacción es la alegría, la recompensa, que obtienes después de luchar duro por lograr algo". Y añade: "Todos los seres humanos tenemos que luchar, que esforzarnos, que sacrificarnos, incluso necesitamos el dolor en nuestras vidas, porque así es como ganamos algo". Las cosas que nos exigen esfuerzo son las que más valoramos. Nos sabe mejor un aprobado cuando hemos estudiado mucho o valoramos más llegar a una cumbre cuando lo hemos hecho con nuestros propios pies. Así es la vida.
Creer que tienes que ser una de esas personas especiales que ya han alcanzado la felicidad
"Siempre andamos buscando a alguien que haya llegado ya a ese lugar extraordinario donde no se sufre ni se tienen dudas. Parece que nadie quiere aceptar que todos tenemos vidas normales en las que existe la enfermedad, el envejecimiento y, finalmente, la muerte. Y sabemos que ésta es la verdad. Cualquiera que intente decirnos lo contrario nos está vendiendo humo", explica explica Robert Waldinger, psiquiatra de la Universidad de Harvard. "La vida incluye momentos de claridad y momentos de confusión, momentos de alegría y momentos de tristeza. Y es un gran consuelo saber no estamos solos, que todos vivimos así". "Apreciar lo ordinario hace que la vida cobre más vida, la hace reventar. Escuchar tu canción favorita como si la estuvieras escuchando por primera vez, ver el sol filtrarse a través de las hojas de un árbol, mirar a tu pareja y darte cuenta de lo asombroso que es que estés junto a esa persona. Se trata de reconocer que la satisfacción no es una meta lejana, sino una realidad presente que hay que abrazar".
Pensar que la felicidad está más en autocuidarte que en la conexión con los demás
El pensamiento humano se caracteriza por tener un sesgo egocéntrico. "Durante este tiempo me he dado cuenta de que existe un mecanismo común en la infancia que podría dar respuesta a algunas preguntas sobre la felicidad", explica el galardonado catedrático de Psicología del Desarrollo de la Universidad de Bristol Bruce Hood. Y añade: "Puede que nuestro sesgo egocéntrico nos acompañe siempre, pero podemos aprender a pensar de un modo más alocéntrico", es decir, preocupándonos más por los demás que por nosotros mismos, explica el autor de La ciencia de la felicidad. Cuando decidimos ser alocéntricos, podemos hacer que los problemas y preocupaciones que nos echamos a la espalda sean más livianos, y beneficiarnos del apoyo y la objetividad que proporcionan las interacciones sociales". De hecho, "nuestros problemas nos parecen mayores de lo que en realidad son. No somos conscientes de que los demás tienen sus propios problemas, o, si lo somos, pensamos que no se pueden comparar con los nuestros. En lo que a nosotros respecta, las dificultades a las que nos enfrentamos son las más importantes", explica. Sin embargo, es posible ver el mundo de otra forma: desde un punto de vista centrado en el otro, o alocéntrico, lo cual puede conducirnos a una mayor felicidad.
Fuente:https://www.telva.com/bienestar/psicologia/2024/08/07/66b213e902136e746f8b4581.html
