La tiroides es una glándula pequeña en forma de mariposa que está ubicada al frente del cuello y es la encargada de producir hormonas que controlan la forman en que el cuerpo utiliza la energía. De acuerdo con Medline Plus, dichas hormonas afectan casi todos los órganos del cuerpo y controlan muchas de sus funciones. Por ejemplo, afectan la respiración, el ritmo cardíaco, el peso, la digestión y el estado de ánimo.
Cuando se producen demasiadas o muy pocas hormonas, esto puede causar problemas de la tiroides que incluyen enfermedades como el bocio que es el agrandamiento de la tiroides; el hipertiroidismo que se da cuando la glándula tiroides produce más hormona tiroidea de lo que su cuerpo necesita; el hipotiroidismo se produce cuando la glándula tiroides no genera suficiente hormona tiroidea; el cáncer de tiroides; entre otros.
Entre tanto, es importante mencionar que las mujeres son más propensas que los hombres a sufrir la enfermedad de la tiroides. De hecho, la Oficina para la Salud de la Mujer de Estados Unidos indica que una de cada ocho mujeres desarrolla problemas en la tiroides a lo largo de su vida y en las mujeres dicha enfermedad puede provocar:
Problemas con el período menstrual: la tiroides ayuda a controlar el ciclo menstrual y dependiendo de la cantidad de hormona tiroidea, los períodos pueden ser muy escasos, prolongados o irregulares.
Problemas para quedar embarazada: cuando la enfermedad de la tiroides afecta el ciclo menstrual, también puede afectar la ovulación, lo que resulta más difícil quedar embarazada.
Ante este problema de salud, es importante acudir al médico para diagnosticar el tratamiento a seguir. Del mismo modo, es importante implementar una dieta saludable que contribuya con la salud de la tiroides, pues algunos alimentos ricos en yodo ayudan a evitar problemas de hipotiroidismo.
Por lo anterior, el portal web La Vanguardia señala que uno de los alimentos recomendados para prevenir el hipotiroidismo es la mantequilla, un producto lácteo elaborado a partir de la leche de vaca. Aunque está compuesta de un 80% de grasa, el resto de su contenido es agua, lo que lo convierten en un alimento muy calórico. También contiene yodo altamente absorbible que favorece el buen funcionamiento del metabolismo.
Como tal, la manteca es una de las grasas más complejas que existen, pues contiene hasta 400 ácidos grasos diferentes. “Además, es rica en varias vitaminas, entre las que están la vitamina A, D, E, B12 y K2; por todo ello la OMS recomienda su consumo en pequeñas cantidades siempre y cuando no padezcamos colesterol”, indica el portal en mención.
Otros beneficios que ofrece este ingrediente
A pesar de ser un alimento con un alto contenido en grasas, su consumo con moderación favorece algunos problemas de salud:
Antioxidante: la manteca aporta importantes antioxidantes como las vitaminas A y E, y selenio. Además, es una de las mejores fuentes de vitamina A.
Favorece la salud de los huesos: la manteca de vacas alimentadas por parto contiene grandes cantidades de Vitamina K2, la cual previene la calcificación arterial y mejora la salud de los huesos.
Mejora la salud digestiva: la grada de la manteca contiene ácidos grasos que protegen frente a infecciones gastrointestinales.
¿Cómo preparar manteca saludable?
La revista Mejor con Salud señala la importancia de consumir manteca clarificada. Este es un ingrediente habitual en la gastronomía ayurvédica de la India que se puede comprar o elaborarlo con la manteca habitual. Específicamente es una manteca sin lactosa y con menos grasas saturadas, por lo que es más ligera para la digestión. Así se puede preparar:
En un recipiente colocar un bloque de manteca sin sal.
Luego, colocarlo a hervir a fuego suave, sin tapa.
Remover de vez en cuando y retira la espuma con ayuda de una cuchara.
Dejar que hierva para que genere una espuma con restos sólidos.
Finalmente, retirar del fuego y fíltralo con un colador de tela.
