Por Esther Levy
*Pareciera que las peleas se dan o recrudecen sólo en verano. Sin embargo pasan todo el año y en todos los sectores sociales. No es una cuestión de temporada: tiene que ver con algo que nos está pasando como sociedad, y que este año impacta más porque estamos reviviendo el asesinato de Fernando a partir del juicio.
*La violencia no es patrimonio de los jóvenes. Los distintos puntos de vista o posicionamientos políticos, personales, religiosos no son vistos como eso, sino como un motivo para agredir, agraviar, golpear y hasta asesinar. Además, el caso de Fernando tiene mucho de connotación de clase. El ser distintos y pensar distinto encienden una mecha que está latente. Los jóvenes son hijos de una sociedad que se acostumbró a odiar y hasta a desaparecer, que tiene todavía la impronta de lo que nos pasó en la dictadura e incluso en democracia. Los adultos damos el peor de los ejemplos y estamos fallando, junto a las instituciones. Tenemos que empezar a pensar cuál es nuestro rol.
*La violencia se profundiza por muchos factores, como el poder y la impunidad. En el caso de Fernando, los ocho o 10 delincuentes son hijos del poder en una ciudad donde siempre hicieron lo que quisieron y nunca pagaron por ello, en una sociedad chica donde todos se conocen y el miedo hace que no los denuncien porque hay represalias. Cuando salen de esa burbuja de Zárate finalmente caen en manos de la Justicia; cuando están en un territorio que no es el de ellos. La impunidad de la mano del poder es histórica y repetida, y esto tiene que ver con cuestiones de clase.
*El problema de la violencia se fue sedimentando. La solución no es rápida. Es multidimensional. La educación tiene mucho que ver, porque la violenca física y verbal es un problema cultural. Los medios tienen en su mayoría objetivos mercantiles y no sociales. Tendrían que pensar qué se transmite y qué no, qué es espectáculo y qué no. El Estado tiene que definir políticas de intervención social urgentes. La Justicia, actuar.
*Doctora en Educación de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA.