Por Mempo Giardinelli
Quizás la noticia más infame de la semana fue el posible nombramiento del Sr.Daniel Scioli como Secretario de Turismo, Medio ambiente y Deportes. Podría ser designado por su amigo el ministro del interior Guillermo Francos, fue para muchos una doble jugada "perversa": del ministro y de quien en 2015 fue candidato presidencial kirchnerista.
Claro que a la vez, y en tren de sorpresas, asombró también el pronunciamiento del Sr.Luis Barrionuevo respecto del Presidente Javier Milei, llamando también él al paro de pasado mañana en rechazo al MultiDNU y la Ley Ómnibus que quiere Milei. "El Presidente está totalmente equivocado" —sentenció— "ha errado el rumbo al hacer suyo el proyecto de Mauricio Macri para Patricia Bullrich a través de Federico Sturzenegger".
Lo cierto es que —igual que en la Ínsula Barataria cervantina— resultará imposible someter a toda una nación a un vaciamiento como el que procuran estos sujetos, montados en traiciones, falsedades y generalización del hambre y el embrutecimiento como los que ya afectan en forma severa al pueblo argentino.
En la clásica obra de Miguel de Cervantes Saavedra está claro desde el vamos que el ridículo jamás conduce a nada bueno. Y a la par, en la tragedia argentina contemporánea si hay algo que no existe es el buen humor, porque todo gira en torno del capricho autoritario de un pichón de dictador que por lo menos, y para decirlo suave, no parece estar en todos sus cabales.
Claro que de ninguna manera esta columna se atrevería a definir psicológicamente a nadie, pero sí, en este caso, pueden señalarse algunas muestras de comportamiento atrabiliario, que se define lingüísticamente como "genio destemplado y violento", y que suele completarse con cierta desorganización en el pensamiento, combinada con creencias no siempre basadas en la realidad. Y en algunos casos, incluso, y en contextos de enojos, estallidos de furia, temores y/o sospechas infundadas, semejante combo puede evidenciar pensamiento desordenado y propensión a autoconvencerse de ideas extrañas.
Lo cierto es que, si acaso literariamente sólo campeara el buen y lúcido humor, todo lo que reluciría en tal caso es el odioso capricho autoritario y el peligro de violencias físicas contra un pueblo ya sometido a la pobreza y la desesperanza. Que hoy es lo que enerva a esta nación por decisión y tozudez de un presidente que desde el mismo día de su primera batería de “decisiones” empezó a ser repudiado por la creciente mayoría de la población, que poco antes lo había votado y aplaudido.
En suma, lo que alarma a algunos observadores consultados es, fácticamente, el peligro de violencia física que pueda ejercerse no ya en perjuicio de algunas personas, cercanas o no al sujeto en análisis, sino contra un pueblo ya sometido a la violencia del hambre, la ignorancia y la desvalorización brutal y grotesca de la moneda nacional, como se está viendo en esta República, y que es lo que enerva a una ciudadanía a la que no le alcanza el poquísimo dinero que percibe, gana o cobra, frente a un Presidente que desde su primera batería de “medidas” empezó a ser cuestionado y resistido incluso por sectores de la población que lo habían apoyado, algo que nunca antes había sucedido, ni en las dictaduras.
Podría afirmarse, en plan positivo, que precisamente por esos peligros, dolores y retrocesos es gratificante que el Pueblo Argentino se pronuncie y se muestre ahora —a sólo 40 días del coronamiento— tan decidido a reconstruir rápidamente la democracia veloz y odiosamente maltratada y pervertida.
Y es que ha surgido y crecido la conciencia —aun desde las ruinas del Congreso y la Justicia republicanas— de que este gobierno nos va a dejar, para decirlo sanmartinianamente, en pelotas.
Y especial y particularmente esto alarma a la población porque, en materia de soberanía sobre los bienes naturales —tierras, ríos y mares ubérrimos— toda esta nación es consciente y orgullosa. Tanto que ya es obvio que todo lo que hoy atenta contra la libertad, la democracia, la industria, el trabajo y el bienestar, será invalidado dentro de 4 años cuando estos tipos se vayan, corridos por el voto democrático, pero dejándonos tierra yerma, hambre y sangre, oscuridad e ignorancia y un desánimo como el de los pueblos derrotados de la Historia Universal que jamás pudieron recuperarse y algunos hasta dejaron de existir.
Por todo eso es urgente y sana la respuesta democrática del pueblo argentino. Por eso el paro general de este miércoles 24 de enero será total, masivo, liberador y correctivo de los rumbos disparatados de la cipayía gobernante y de sus aliados.
Y por cierto, y en poco tiempo más, es presumible que el planeta entero —es decir todas las naciones de la Tierra, mantengan relaciones o no con la República Argentina— será consciente de que nada de lo decidido por el actual gobierno será respetado ni válido constitucionalmente, toda vez que puede afirmarse que la Constitución Nacional, la Democracia, el Federalismo, el sistema legislativo y la Justicia han dejado de funcionar con mínima razonabilidad.
Y peor aún, la autoritaria y repugnante cesión y entrega del patrimonio público del pueblo argentino, así como de todas las riquezas y bienes naturales, y más la soberanía vilmente destruída, y más el endeudamiento tramposo, permiten ya advertir ante todos los gobiernos del mundo que de ninguna manera esas deudas y exacciones, injustas y violentantes, obligarán al pueblo argentino, por lo menos desde el día 10 de diciembre de 2023 en adelante.
De igual modo que es previsible —todo sea dicho— que todas las decisiones cuestionables del actual gobierno también serán revisadas y retrotraídas legalmente en lugar de las tradicionalmente rápidas y engañosas validaciones históricas, irresponsables y canallas que sólo sirven para favorecer a ladrones y corruptos.
Diversas expresiones políticas ya anuncian a todos los pueblos y gobiernos del mundo que es imperativo que se notifiquen de todo esto. Y bueno será que esta decisión de Resguardo de Soberanía pase a ser, de ahora en adelante, la única bandera de compromiso moral, nacional y popular, del Pueblo Argentino. Y si de alguna manera había que expresar estas reservas ante todos los gobiernos del planeta, este miércoles será la mejor ocasión para dejarlo formalmente declarado.
Por todo lo anterior, además, debería quedar expresamente desautorizada toda cesión territorial que haga el gobierno argentino actual, dicho en el sentido de que no se respete ninguna renuncia o cesión territorial, ni medida alguna que afecte o disminuya los Derechos de Soberanía del Pueblo Argentino vigentes al día 9 de Diciembre de 2023. El mundo entero tiene que saber todo esto, en orden a que ninguna decisión antinacional tomada por el gobierno actual sea tenida por válida ni obligue a futuras autoridades y gobiernos.
Antes y al contrario, todas y cada una deberían ser tenidas por nulas de nulidad absoluta y solamente sujetas a la voluntad popular, para lo que convendría anunciar desde ya que la Constitución Nacional de la República Argentina será revisada, rediscutida y reformada in totum mediante el respeto absoluto a la voluntad popular.
De donde ésta debe quedar proclamada como la primera y principal medida a tomar una vez que el actual gobierno sea desplazado por votación popular o por la única decisión moralmente digna que podrían tomar el Sr. Milei y todo el funcionariado que lo acompaña: renunciar e irse del territorio nacional...