Por Yas García
En contexto de pandemia, hemos confirmado la utilidad de los datos, al convertirse en un insumo clave para monitorear la evolución del Covid-19 en cada región, pero también para desarrollar acciones y estrategias diarias en función de su avance.
Hablar en el 2021 del potencial de los datos puede sonar trillado. Todo es datos. Desde que abres los ojos al despertar y aunque no lo hagas, estás generando datos. “¿Cómo?, pero si no uso apps para dormir o un gadget como un smartwatch para medir mi sueño”. Al no usar dispositivos en la noche o en horarios puntuales, implica que estás inactivo. Podemos dar miles de ejemplos. Esto se traslada no solo al uso comunes o comercial de los datos; también al potencial de impacto social; datos para generar impacto social, para generar soluciones innovadoras a problemas públicos, informar sobre la ejecución de políticas públicas, fortalecer el ecosistema emprendedor, lograr investigaciones periodísticas, organizaciones que puede potenciar su incidencia o investigaciones para la cura de una enfermedad. Y tener los datos públicos y abiertos del Estado, se vuelve una fuente relevante.
Trasciende el paradigma de que la ciudadanía disponga de datos para controlar o exigir rendición de cuentas como clave, sin embargo, no es el único aspecto valioso de la apertura ni de los datos como derecho.
En contexto de pandemia, hemos confirmado su utilidad, al convertirse en un insumo clave para monitorear la evolución del Covid-19 en cada región, pero también para desarrollar acciones y estrategias diarias en función de su avance. La incidencia de organizaciones para que los datos sean públicos y en formatos abiertos para su utilización fue y es clave.
En este contexto, Desde Fundación Conocimiento Abierto, con el apoyo de especialistas en datos y con la experiencia de casi diez años de trayectoria en la ejecución de proyectos basados en tecnología dato y evolucionado hacia la implementación de inteligencia artificial aplicada para diseñar mejores políticas públicas y promover el cambio social, creamos una herramienta para: buscar información, discernir su relevancia, organizarla de modo coherente y presentarla de forma clara.
Ponemos en disponibilidad análisis, visualizaciones, estándares, normativas, y portales de datos con el objetivo de monitorear y concentrar información relevante sobre proyectos y políticas públicas basadas en el uso de grandes volúmenes de datos (big data).
Te invitamos a conocer a la plataforma e interactuar en ella: https://observatoriodatos.org/
(*) Directora Ejecutiva Fundación Conocimiento Abierto