Por Ricardo Bustos
Algo no está bien en nosotros. Tenemos como prioridades la diversión, pero no la educación, el fútbol, pero no los deportes, la silueta pero no la salud, salimos a caminar, trotar, gastar energías de manera exagerada para adelgazar sin consultar al Médico, pero no dejamos de comer en exceso todo lo que nos hace aumentar de peso.
Nos "mal alimentamos" con comidas chatarra que enferman el organismo y pagamos 3 o 4 veces más caro, nos gustan las verduras frescas pero no hacemos una huerta ni para perejil. Las modas y tendencias, reemplazaron a los gustos éticos y estéticos. Hoy los jóvenes hablan "gesticulando o bailando" y no se les puede entender qué dicen porque tienen su propio modo de hacerse comprender entre los pares , pero si necesitaran de algún idioma para una profesión, tienen pereza para estudiar. La sociedad no dialoga, solo envía mensajes o caritas para expresar lo que no se atreven a decirte en la cara. Abuelos o Padres en muchos lugares, son elementos descartables que terminan como turistas o pasajeros de un Geriátrico (muchas veces contagiados por Covid 19) y no se los visita ni para los cumpleaños. Los niños están desorientados porque las nuevas generaciones de Padres forzados, no les tienen paciencia. Las Religiones se convirtieron en fotocopiadoras de versículos, la política en un gran agujero negro profundo y la vida en general en un reflejo fiel de todo lo que somos y hacemos. Durante una semana, Messi ocupaba la tapa de los Diarios y sitios informativos y en TV, la pregunta era ¿Se va o se queda Messi en Barcelona? como si nosotros fuéramos parte del contrato desquiciado que tiene con el único Club que conoce, ama y por lógica siente en su alma porque allí vive, tiene a sus hijos, esposa y Amigos. Nos hacemos dueños de lo que no siempre pertenece a nuestras vidas, aún de aquello que está en las antípodas culturales.
(El libro de quejas está a disposición en mi planeta "Ganimedes" por si no están de acuerdo con esta reflexión).