Efectivos respondieron el pedido urgente de un hombre para llevar al hospital a su hija, que estaba a punto de dar a luz. Cuando volvían, otro ciudadano solicitó la misma asistencia.
Efectivos policiales de la Comisaría 15 de la ciudad de Corrientes colaboraron en dos partos en el lapso de una hora durante la madrugada del domingo, trasladando a ambas mujeres al hospital.
Se trata del oficial Miguel Colman y su compañero, el cabo Vicente Franco, quienes se hallaban de guardia.
Durante horas de la madrugada, aproximadamente a las 4.30, un hombre alterado llegó a la citada dependencia policial.
Con desesperación, explicó a los efectivos que su hija embarazada necesitaba ayuda urgente para llegar a un centro de salud.
La joven, de 27 años, Yésica, había entrado en trabajo de parto de forma repentina.
Los efectivos dieron respuesta al pedido y se dejaron guiar por el hombre.
Con el patrullero, se trasladaron hasta un domicilio del barrio Río Paraná, en una zona conocida como “la bajada de la araña” y caracterizada por ser poco accesible.
Al llegar, subieron a la joven embarazada al móvil policial y la llevaron hasta el Hospital Vidal, donde dio a luz al bebé.
Sin embargo, la emocionante noche continuó para ambos efectivos policiales.
Cuando regresaban del hospital, por avenida Alta Gracia, un hombre les salió al paso, realizando señas desesperadas con sus brazos.
El ciudadano les pidió a los uniformados que llevaran a su hija Araceli a un centro de salud, porque estaba prácticamente dando a luz. Una vez más, los policías fueron hasta otro domicilio del barrio Río Paraná, ubicado por la calle Mocoretá.
Subieron a la joven de 17 años a la camioneta y la trasladaron de urgencia hasta el mismo hospital.