El bebé que fue hallado muerto dentro de un ropero en un domicilio del barrio 202 Viviendas de Gobernador Virasoro, falleció por causas naturales al momento del parto, descartándose la responsabilidad de la madre. Lo confirmó el comisario Walter Rodríguez, quien dio detalles de la autopsia respectiva. La parturienta recuperó la libertad, aunque se le imputan negligencias. La criatura habría muerto al ahogarse con líquido amniótico.