Los gobernadores de Chaco y Corrientes se reunieron en la provincia vecina y tocaron varios temas, aunque el excluyente fue la construcción del segundo cruce interprovincial. “Sin lugar a dudas, el desafío más grande”, dijo Valdés.
La reunión se llevó a cabo en la Casa de Gobierno de Corrientes y luego del encuentro se llevó a cabo una conferencia de prensa entre ambos mandatarios donde contaron los ejes principales que se tocaron y resaltaron varias veces que acordaron “trabajar en conjunto”.
El primero en tomar la palabra fue Jorge Capitanich, quien al finalizar fue agasajado por el anfitrión de la mañana, su par correntino, y recibió el decreto que lo declaró Huésped de Honor.
Tras los pasos protocolares, sí se dispusieron a hablar netamente de lo que fue la reunión, en la que, además del segundo puente, también hablaron sobre la inclusión de Corrientes a la red de gasoducto, la integración de sendas economías regionales, la hidrovía, turismo e industria forestal.
Pero la agenda tuvo un tema central. Tal lo expresó Gustavo Valdés, “sin lugar a dudas el desafío más grande es que las provincias puedan estar unidas por otro puente”.
En ese sentido, el gobernador de la vecina provincia resaltó que más allá de los colores de los gobiernos nacionales, el proyecto no se pudo concretar. “No fue posible el puente con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, no fue posible con Macri, pero correntinos y chaqueños tenemos que trabajar juntos para que los gobiernos –nacionales- pongan la vista en la necesidad de este hermanamiento, que sea una vía de acceso y desarrollo para toda la región, sabemos que tiene que haber más integración y mayor calidad en las vías de acceso”.
Hace ya varios años se busca la construcción de un nuevo puente interprovincial, pero debido a la fuerte inversión necesaria y a cambiantes contextos económicos, no se pudo materializar. En 2018, Valdés había celebrado la inclusión del proyecto en una licitación de Participación Público-Privada (PPP). Dos meses después se suspendió la licitación debido al alto nivel del índice riesgo país.
En ese contexto, Valdés explicó que “el segundo puente tiene proyecto ejecutivo, lo que no tiene es financiamiento. Se pensaba financiar en su momento a través de las PPP, pero financiar por PPP a estas tasas es absolutamente inviable, si no tenemos estabilidad es difícil”.
Es por eso que nombró una acción conjunta, con la que Capitanich coincidió, que es “incorporar al Presupuesto nacional una garantía soberana de la República Argentina, de manera de buscar el esfuerzo, de buscar financiamiento, ya sea, nacional, regional, internacional”.
“Sabemos que el gran desafío que tenemos es la unión física entre Chaco y Corrientes o Corrientes y Resistencia para lograr mayor circulación”, agregó.
Sobre el tema, Capitanich contó que durante la visita de Alberto Fernández a Chaco en enero pasado, sobrevolaron la zona del puente. Según detalló el mandatario chaqueño, “la pregunta inmediata que me hizo fue el costo y a su vez también si las condiciones de factibilidad acreditaban la necesidad de construir un nuevo puente”. “Le transmití que los estudios indicaban que la Tasa Meda Diaria Anualizada de Tránsito hacía necesaria la construcción de la obra para integrar el núcleo urbano de ambas ciudades”.
“El primer paso es discutir en el ámbito del Congreso de la Nación dentro de la Ley de Presupuesto el aval del Tesoro a una garantía soberana para habilitarnos a la búsqueda de financiamiento con multiplicidad de fuentes posibles y dispersas, con lo cual la voluntad de nuestra parte es trabajar con el objetivo de obtener el financiamiento para garantizar la ejecución de la obra”, señaló el gobernador chaqueño.
HIDROVÍA Y GAS NATURAL, OTROS EJES DE LA REUNIÓN
La charla entre ambos gobernadores del NEA también recorrió otros ejes, como la inclusión de Corrientes a la red de gasoducto, la integración de sendas economías regionales, la hidrovía, turismo e industria forestal.
“Es absolutamente necesario que Corrientes y Misiones se integren a la red de Gasoducto, por lo tanto es necesario establecer los mecanismos que ameriten la conectividad del gasoducto troncal con la red de extensión para la provincia de Corrientes y Misiones”, manifestó Capitanich sobre el tema.
Respecto a economías regionales, el mandatario chaqueño declaró que la integración de las mismas “es un tema clave y en virtud de ello tenemos que trabajar de manera conjunta, independientemente de las parcialidades y pertenencias políticas”.
Además, Capitanich también habló de una regionalización del país y señaló que “creemos ambos que volver a que las provincias se unan en regiones de forma voluntaria para tener políticas en común, activas, con una estrategia para la descentralización de funciones y la jerarquización del federalismo económico, político, social y cultural es una condición necesaria pero no suficiente para el progreso y el desarrollo, tenemos que trabajar juntos y unidos en función de objetivos en común”.
Respecto a la hidrovía, el que tomó la palabra fue Gustavo Valdés, uno de los tres gobernadores radicales que tiene el país. “Comenzamos a hablar de temas que son comunes, como la hidrovía: Corrientes tiene 700 km de acceso al Río Paraná, donde genera una problemática de navegación que es interesante que va a permitir en el futuro abaratar la logística del comercio que es fundamental para generar desarrollo.
“Somos la puerta de entrada a la navegación del Paraguay, pero tiene que ser una vía no solo eficiente para Paraguay, sino eficiente para nuestra región como objetivo central, que pueda ser directamente exportadora de nuestra materia prima y que sea receptora del comercio”, expresó.
Sobre la posibilidad de sumar a la vecina provincia a la red de gasoducto, el mandatario correntino consideró que “se tiene que revertir el flujo de gas” y aclaró que “teníamos la cabeza puesta en traer gas de Bolivia, hoy tenemos la vista puesta en Vaca Muerta”.
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