En Lanús, Grindetti gira iniciativa para cobrarle una alícuota a las grandes empresas mientras que, en línea con lo ocurrido en Castelli, el distrito de Lavalle aprobó el cobro de un "impuesto" excepcional.
La llegada del coronavirus y su consecuente cuarentena dejó a los municipios de la Provincia en una situación de crisis económica. Más allá de la ayuda de Nación y del accionar de la Provincia, son muchos los distritos que se vieron en la obligación de tomar deuda para pagar los salarios locales producto de la fuerte baja recaudatoria que sufrieron en los últimos meses.
Pese a que las grandes localidades del conurbano cuentan con una espalda más grande que las ciudades del interior, la pandemia económica ya empezó a tomar forma en las arcas municipales. En esa línea, son varios los alcaldes que comenzaron a enviar proyectos a sus respectivos concejos deliberantes con el fin de conseguir la aprobación para empezar a cobrar una serie de tasas extraordinarias.
El plan consiste básicamente en generar mayor recaudación para un momento que, más allá de ciertas aperturas, no permite tener el flujo habitual de la economía.
Es por eso que los alcaldes fijaron a los grandes contribuyentes como principal foco de recaudación. Una medida que, incluso, se anticipa a una discusión nacional que el Congreso todavía no empezó a dar y que, de antemano, ya genera grandes contraposiciones.
El primer distrito en generar una acción concreta en este sentido fue Lanús donde, contrario a lo que muchos podrían suponer, por tratarse de un intendente de Juntos por el Cambio, Néstor Grindetti envió al Honorable Cocejo Deliberante (HCD) local un nuevo proyecto de ordenanza fiscal que apunta al cobro extraordinario a las grandes empresas.
Según informó el Gobierno comunal a través de un comunicado, la tasa estará dirigida a las empresas cuya facturación supere los 50 millones de pesos y hayan tenido actividad comercial normal durante la época de la cuarentena. La iniciativa también prevé una reducción de tasas para las pymes locales afectadas por el parate de la actividad económica de los últimos dos meses.
“Como hicimos en 2016 pusimos una alícuota extraordinaria con dos condiciones: que hayan facturado más de 50 millones de pesos y que no hayan tenido cerrado su negocio. Algo que, por ejemplo, un supermercado puede pagarlo. Es una forma de responder a una demanda del sector económico del municipio para lograr una reducción de las tasas para las pymes cuya incidencia en las grandes empresas es bajo pero cobra gran valor en los más pequeños”, aseguran fuentes cercanas al intendente.
En lo que respecta al interior, el primero en llevar adelante una iniciativa de estas características fue el municipio de Castelli, donde el intendente del Frente de Todos, Francisco Echarren, propuso cobrarle un tributo por única vez al sector agropecuario.
La iniciativa del alcalde ya arrojó sus primeros resultados. “En Castelli, casi el 90% de los productores rurales ya pagaron el tributo por la pandemia. Queda demostrado que pedirle un esfuerzo al sector con mayor capacidad económica es el camino”, celebró Echarren en su cuenta de Twitter. Lo percibido por ese concepto equivale a un mes más de recaudación, y la cobrabilidad está por encima del promedio de las tasas ordinarias.
El tributo se exige a productores rurales del municipio en relación a superficie de las unidades productivas, con valores de entre 8 mil y 44 mil pesos. Más de 530 contribuyentes son alcanzados por la medida, que tiene dos particularidades: es de carácter voluntario -se puede tramitar la eximición- y se devuelve en el caso de que el dinero recaudado no se utilice.
“Quedaron atrás los intentos que hicieron los macristas de judicializar esto. La inmensa mayoría comprende la realidad y pone el hombro. No hay que dejar que una minoría concentrada se arrogue una falsa representatividad. Hay que avanzar con los que quieren una Patria solidaria. Son muchos”, aseguró en su cuenta el intendente.
En la misma línea, el Concejo Deliberante de Lavalle aprobó el cobro de una tasa extraordinario a las grandes riquezas que había girado el intendente José Rodríguez Ponte, de Juntos por el Cambio.
Según palabras del alcalde la iniciativa tiene como fin “recolectar fondos para ayudar a la salud, a la emergencia alimentaria y a la seguridad”.
Se trata de una suma de 5 mil pesos para los contribuyentes que tengan una facturación de tres a seis millones de pesos anuales y de $10 mil para los que superen esa suma.
En declaraciones vertidas a un medio televisivo, Rodríguez Ponte aseguró que “los distintos sectores consensuaron con el Concejo Deliberante, totalmente autónomo y no sujeto al ejecutivo municipal, y ellos democráticamente redujeron las escalas. El sector rural aporta unos $700 mil”. Y sumó que “nosotros pedimos ayuda en Salud. Mandaron pero fue muy escasa. Algo de alimentos que no alcanzan para cubrir a los que quedaron desplazados del mercado laboral, autónomo”.
La norma establece, además, que aquellos contribuyentes que abonen más de 150.000 pesos por el período 2020, deberán aportar un 5% de los montos que correspondan pagar en forma anual. Y para aquellos que paguen más de 300.000, el valor será del 10%.
Alivio en combustibles
El HCD de Berisso aprobó hace unos días un proyecto de Ordenanza enviado por el intendente Fabián Cagliardi, del Frente de Todos, que dispone la derogación de la tasa de mantenimiento vial.
De esta manera, el órgano legislativo derogó, por unanimidad, la Ordenanza Municipal N° 3635 que alcanzaba a todos los usuarios que adquieran combustible para su uso o consumo, en el ámbito del distrito.
“En mi función de concejal me opuse firmemente a la implementación de este tributo que era injusto para los vecinos y conformaba una carga más al bolsillo de los contribuyentes en una situación económica apremiante”, aseguró Cagliardi sobre la tasa que estaba vigente desde 2017.
De esta manera, en las estaciones de servicio de YPF, el litro de nafta súper pasó de $55,33 a $54,48 y el de Infinia de $63,80 a $63,35. En tanto que el gasoil D500 bajó de $52, 39 a $52,04 y el gasoil Infinia pasó de $60,34 a $59,99.
“La situación financiera del municipio es delicada y sumada a la caída abrupta de la recaudación ante la pandemia de Covid- 19 necesitábamos generar instrumentos para que las arcas del municipio no sean afectadas por la medida. Para ello lanzamos un nuevo plan de pago con quitas de 100 por ciento de intereses y hasta 48 horas para que los contribuyentes con deuda puedan regularizar su situación. Tenemos la certeza que el vecino de Berisso nos va a acompañar por eso en paralelo decidimos derogar este impuesto”, sostuvo el alcalde.
Descuento para comercios
Ante el aislamiento social y obligatorio que decretó el Gobierno Nacional, y que llevó a una merma importante de la actividad industrial y comercial, la Agencia de Recaudación de San Isidro (ARSI) definió un descuento de un 50% de descuento en la base fija de la Tasa de Inspección de Comercios e Industrias durante las cuotas de mayo y junio.
Este descuento se suma a otros ya otorgados previamente por buen cumplimiento, pudiendo llegar en total al 80% de reducción de la tasa para los pequeños y medianos contribuyentes.
En el municipio vecino de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini determinó una medida de alivio para comerciantes, un sector que se vio perjudicado por las restricciones producidas por la cuarentena obligatoria para prevenir el virus Covid-19. Así, a quienes desarrollen actividades comerciales y de servicios se los eximirá del 100% del pago del importe de la Tasa por Inspección de Seguridad e Higiene y Conexas (Tasa Fondo de Seguridad, Tasa Fondo Especial Integral Social) de los meses de abril y mayo. Ámbito
