En tanto el gobierno provincial asegura que sigue de luna de miel con el poder ejecutivo nacional, producto de la buena sintonía Ricardo Colombi – Mauricio Macri; lo que aparentemente traería una lluvia de inversiones en nuestro territorio; varias fuentes consultadas por CorrientesHoy.com aseguran que en la provincia “no se mueve un ladrillo”.
Por caso en las obras públicas. De cara al inicio de la segunda semana, completita, del mes de marzo. No se ha puesto en marcha ningún grupo habitacional, no hay nada con relación a la reparación de caminos, tampoco “algo” que sirva para poner esos millonarios carteles de la obra pública en las escuelas que solo sirven para criticar porque –por ejemplo- una escuela de seis aulas se evalúa en más de cinco millones de pesos cada aula y no se terminan nunca.
En la zona del noroeste provincial, que comprende Colonia Liebig y San Carlos, solo están los carteles pintados y el personal de la Dirección Provincial de Vialidad, bastante inutilizados porque no les llegan los materiales, tampoco los insumos y, menos, algún indicio económico que les permita, a su vez, a los técnicos, operarios o administradores de la DPV, hacer subcontrataciones, porque no se dispone un centavo, para nada ni nadie.
Lo más certero es que la obra pública está paralizada en. Al menos es lo que aseguran varios testimonios recogidos por nuestro portal.
ANTECEDENTES
Parece que con el final del año 2016, se terminó el “negocio” para algunas constructoras. Tal vez porque la exageración de precios era muy evidente. Pero nada pasa, todo cae en saco roto y camina hacia el olvido.
Dos obras de la empresa ARCA en Mercedes, una constructora con “mucha” historia, últimamente muy ligada a los gobiernos de Colombi; marca en una de ellas, la edificación de una escuela de solo seis aulas con una inversión de $31.784.216.74, con un plazo de ejecución de 360 días. Estimativamente, aunque se construyan otros sectores complementarios de todo edificio educativo, en promedio cada aula le costó al estado alrededor de $5.300.000.
Para un sorprendido grupo de ingenieros, los números fueron sumamente inflados. En su oportunidad se las relacionó con emprendimientos similares en el Chaco; donde con igual cantidad de dinero se ejecutaban dos establecimientos escolares de mayor envergadura en esa provincia.
También se insumieron $15.232.967,76 en la cimentación del Tribunal Oral Penal, Defensoría y Fiscalía de Cámara. Se entiende, por los montos expuestos, que las construcciones pasaron el cedazo de una licitación pública como marca la ley de administración financiera del Estado.
El dato más interesante: cuáles fueron las constructoras que perdieron la compulsa, entendiendo que ofertaron un mayor precio. Se nota que está muy armado el tema.
Después de todo este carnaval de precios, parece que la administración radical paró la mano, barajó de nuevo y disimularía un poco “tanta” inversión. Por el momento, no se mueve un ladrillo en todo el mapa correntino.
