Cerca de diez personas se juntaron en casa de McKennie, rompiendo así las normas contra el coronavirus, entre los que asistieron el argentino y el brasileño Arthur. Para colmo, dos compañeros dieron positivo en las últimas horas.
Turín, como varias ciudades de la zona en Italia, se encuentran en "zona roja", alertados por la gran cantidad de contagios de coronavirus. Las autoridades determinaron que sólo se puede salir de casa por exigencias de salud o trabajo y hay toque de queda a partir de las 22. Pero este miércoles por la noche, tuvo lugar un escándalo que involucra a tres futbolistas de la Juventus.
Paulo Dybala y Arthur se reunieron en casa de su compañero Weston McKennie junto a cerca de diez personas, según La Gazzetta dello Sport. Alertados por los vecinos, los carabinieri (organismo de seguridad) irrumpieron en la fiesta forzando la entrada y desmantelaron la reunión. El hecho tomó gran relevancia en Italia, repudiando sus acciones.
Además de las multas que impusieron las fuerzas del orden, lo más probable es que el club también concrete sanciones para con los futbolistas. Sin embargo, no incluirían ausencias en el campo de juego, por lo que los tres estarían disponibles para el duelo de este sábado ante Torino. Dybala, tras más de 80 días ausente, podría volver a ser convocado al derbi de Turín.
Alarma en Juventus: dos casos positivos de coronavirus
Merih Demiral y Leonardo Bonucci fueron confirmados por la Vecchia Signora como casos positivos de Covid-19. El central italiano de 33 años venía de disputar las Eliminatorias UEFA con su selección.