Boca quedó en las puertas de un nuevo título de Copa Libertadores, la máxima obsesión del Xeneize, la cual le es esquiva desde 2007. El conjunto de Almirón cayó por 2-1 ante Fluminense en el Maracaná. Con goles de Germán Cano y Kennedy, mediante el empate de Advíncula, el Tricolor se hizo con la primera máxima competición de Conmebol en su historia y le arrebató la ilusión a todo el pueblo Xeneize.
Si bien el Boca de Almirón es el único equipo argentino que logró llegar a la final de Copa Libertadores, sumado a que también se encuentra en semifinales de Copa Argentina, el entrenador podría sufrir una racha negativa que lo condenaría históricamente en el Xeneize.
Es que el ciclo de Almirón finaliza en diciembre, y, en caso de no renovar su contrato con la entidad de La Ribera, podría convertirse en el primer entrenador que no sumó ningún título en su mandato desde que llegó a Boca, desde Carlos Bianchi en 2013.
Al entrenador del Xeneize le quedan tres partidos por Copa de la Liga, en los que ya casi no tiene chances de poder acceder a la ronda eliminatoria. Además, también debe disputar las semifinales de Copa Argentina ante Estudiantes, el próximo 15 de noviembre. La derrota ante Fluminense por la final de Copa Libertadores, abrió una grieta en el ciclo de Almirón, quien pasó de coronar la gloria eterna, a irse por la puerta de atrás sin ganar ningún título con Boca.
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