Regatas Corrientes cayó con San Martín en el clásico correntino por 80 a 74. Más allá del resultado, el color que le puso el público en la vuelta del equipo a su casa marcó la noche.
Tras 589 días el Club de Regatas Corrientes volvió a jugar en su estadio, en el José Jorge Contte, y, nada más ni nada menos que, frente a su clásico rival, San Martín. El duelo quedó en manos del “rojinegro” por 80 a 74 en el marco de una verdadera fiesta del básquet, con un estadio repleto de color y pasión a pesar de la capacidad reducida.
En poco tiempo de juego, San Martín demostró su estilo de juego, atacando desde el pick and roll, con buena puntería desde 6,75, y sobre todo sacando ventaja en la zona pintada puso un primer parcial de 18 a 2 en cinco minutos de juego. El “remero” le costó penetrar la línea defensiva de su rival que siempre lo esperó bien plantado, y por ello debió recurrir al lanzamiento a distancia, acertando tres bombas seguidas (Arengo, Hogan y Giordano) para acortar la brecha 22 a 12 con 2 y medio por jugar. La reacción continuó y sobre el cierre pudo recortar aún más, a 7 puntos, pero un doble de Ramírez Barrios (9 en el cuarto) dejó las cosas 26 a 17.
El “remero” emparejó más aún la historia en cuatro minutos, con dos bombas de Quinteros para poner las cosas 31 a 28. El encuentro se tornó mucho más dinámico y vertical, cosa que le sentó mejor al “rojinegro”, quien con Ferreyra y Méndez sumó para volver a alejarse 42 a 32 con dos minutos en el reloj. Luego, el “fantasma” pudo recortar tras dos libres de Hogan (11 en el primer tiempo) y un triple por tablero de Arengo, llegando al cierre de la primera mitad 42 a 37. Pero, una guapeada de Ramírez Barrios puso el score definitivo al primer tiempo, 44 a 37.
De vuelta al juego, el partido se volvió un golpe por golpe. Regatas entró en el momento Davis con 9 puntos seguidos, mientras que San Martín repartió bien su goleo en poco menos de cuatro minutos, dejando las cosas 53 a 46. Davis siguió facturando (13 en total en el cuarto), pero el “santo” estuvo afilado para poder soportar la dinámica y se escapó a falta de un minuto 66 a 53, que luego se transformó en 66 a 55 final con un doble de Quinteros.
En el periodo final, Regatas ajustó la defensa tras el pick y le negó una de las vías de gol a su rival, aunque en ataque no pudo terminar de concretar las situaciones que tuvo, y quedó a mitad de camino en la reacción, donde se puso a 7, 71 a 64 promediando el cuarto. Sin embargo, en los minutos finales se hizo grande el eterno Paolo Quinteros para guiar a su equipo en busca del triunfo, y con un minuto en el reloj, un doble de Fernández puso las cosas 77 a 73. En el minuto final el “remero” tuvo chances para ponerse por la mínima diferencia, pero no tuvo la efectividad necesaria, y San Martín desde la línea sentenció el juego por 80 a 74.
Con la derrota los de Piccato alcanzan su quinta caída en el torneo, y necesitan hilvanar victorias para poder acceder a la siguiente fase del Súper 20, mientras que el “rojinegro” se aseguró su boleto al final 8.
Pero más allá del resultado, lo importante del encuentro tiene que ver con el regreso de Regatas Corrientes a jugar en su casa, y también de la vuelta del público que, con sus cánticos, su calidez y su pasión, tiñeron de color de colores la fiesta del básquetbol correntino.
La síntesis:
San Martín (80): Gastón García 3, Matías Solanas 18, Emiliano Basabe 13, Fabián Ramírez Barrios 24 y Javier Saiz 8 (FI); Rolando Vallejos 0, Franco Méndez 5, Santiago Ferreyra 9, Franco Alorda 0 y Dylan Bordón 0.
DT: Diego Vadell.
Regatas (74): Marco Giordano 9, Paolo Quinteros 19, Juan Pablo Arengo 9, Martín Fernández 2 y William Davis II 16 (FI); Agustín Cáffaro 5, Skyler Hogan 11, Joaquín Marcón 0, Tobías Franchela 3, Fabio Gauto 0 y Juan Cruz Scacchi 0.
DT: Gabriel Piccato.
Parciales: 26/17, 44/37 (18/20), 66/55 (22/18), 80/74 (14/19).
Jueces: Jorge Chávez, Leonardo Zalazar y Gonzalo Delsart.
Estadio: José Jorge Contte.