Boca quedó nuevamente en las puertas de una nueva Copa Libertadores, y los fanáticos del Xeneize que revolucionaron el Maracaná, deberán esperar, al menos, un año más, en caso de clasificar a la próxima edición, para ir en búsqueda de la séptima que le es cada vez más esquiva. Fluminense le arrebató la ilusión al equipo argentino y se hizo con la primera máxima competición de Conmebol de su historia.
El Tricolor se impuso por 2-1 ante el conjunto del hoy ex técnico Jorge Almirón, con goles de Germán Cano y Kennedy -Advíncula había empatado el partido en los 90 minutos- el equipo brasileño se adueñó del máximo certamen del continente y se ganó un cupo directo al próximo Mundial de Clubes, donde podría enfrentar al Manchester City de Pep Guardiola y Julián Álvarez.
Para sorpresa de propios y extraños en el mundo Boca, Frank Fabra, uno de los más resistidos jugadores del Xeneize, quien dejó al equipo de Almirón con un jugador menos cuando se encontraba en superioridad numérica por la expulsión de Kennedy, hizo historia en la Copa Libertadores.
El lateral colombiano, pese a la expulsión ante Fluminense en el tiempo suplementario por revisión del VAR, y perder su primera final de Copa Libertadores, se ubicó entre los 10 históricos de Boca con más presencias en partidos de la máxima competición de Conmebol. Incluso, superó, nada menos, que a Martín Palermo, con 45 apariciones. Sin embargo, es el único que no pudo coronar la gloria eterna, dentro del ranking del club.
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