Una de las cadenas más importantes de supermercados de la Capital de Corrientes anunció que los clientes que dejan vehículos en sus estacionamientos deberán pagar por hora, en una polémica decisión que muestra la magnitud de la crisis económica en el comercio local. La medida significa más presión contra el bolsillo de los consumidores.
Es la primera vez que en la Capital correntina a un supermercado se le ocurre pedirles a los clientes que paguen por estacionar en los terrenos que tienen al lado de las sucursales, lo que no se vio ni en la crisis de 2001.
Según pudo saber Corrienteshoy.com, los clientes deberán pagar la suma de 20 pesos por hora, igual que el precio del estacionamiento medido que cobra la Municipalidad de la ciudad tras el tarifazo del 100 por ciento implementado el 8 de mayo. Tendrán un descuento del 30 por ciento aquellos que muestren el ticket de compras en la sucursal.
Los clientes se encontraron con esta polémica novedad en Supermax, del empresario Carlos Irigoyen, donde un cartel rojo les indica con mayúsculas: “La playa de estacionamiento pasará a ser de uso exclusivo privado. Los clientes del supermercado con la presentación del ticket tendrán un descuento del 30 por ciento del valor de la hora”.
La decisión es polémica y hasta puede ser perjudicial para el mismo supermercado en el caso de que la gente decida no ir más a esa firma porque tiene que pagar; y el dato surge en un momento en el que los comerciantes reconocen que existe una evidente caída del consumo por la alta inflación en todos los productos que venden y por la merma del salario real.
De hecho, el propio Carlos Irigoyen dijo el lunes pasado en radio LT7: “Bajó el volumen de ventas porque el factor radica en el problema de inflación, sumado la escalada del dólar y hacemos magia para que los números cierren”.
