En un contexto de inflación y dificultades para abastecerse, los productores de madera y productos industriales a partir de esa materia prima vienen advirtiendo una merma en sus actividades durante los últimos dos meses.
A la cuenca productiva de Santa Rosa se suman ahora voces desde la zona productiva de Santo Tomé, donde advierten que además de la caída en la demanda desde el exterior, el panorama se agrava con los bajos precios para los subproductos en la zona; con el riesgo que acarrea el acopio de chips y aserrín en momentos de adversidades climáticas como los que se pronostican para la primavera y verano.
"Complejo y desalentador" fueron los calificativos con que describió el panorama de actividad Raúl Falero, presidente de la Asociación de Madereros de Santo Tomé, al ser entrevistado por el canal de cable local.
Mercado saturado
"Santo Tomé no está exento del problema general que ocurre en el país, la incertidumbre política económica hace que sea muy difícil llevar adelante los distintos proyectos, además el mercado internacional está muy cambiante, con bajas en los precios y en la demanda.
Muchos se están volcando nuevamente al mercado local, esto hace que el mercado interno se sature y se haga difícil la comercialización, además de que existe un real parate tanto en la construcción como en las otras actividades", describió el referente al noticiero local de Personal Flow.
Por otra parte, Falero sostuvo que "en Santo Tomé, además tenemos una problemática particular, que es la comercialización de nuestros subproductos, que es algo que venimos advirtiendo hace muchísimo tiempo", dijo.
"Pero al no haber una industria que utilice esos subproductos en nuestra localidad hace que tengamos que vender al único comprador existente en la zona, con quien tenemos serios problemas porque no esta recibiendo el aserrín: solamente el chip y el precio no nos cierra, lo que nos obliga a acopiar el subproducto, con los problemas que eso acarrea" advirtió.
En ese sentido, describió que en la actualidad los productores e industrias locales tienen "montañas de chip y aserrín en los establecimientos, sin ingresos por la comercialización de este producto, lo que hace que sea todo mucho más difícil y que la ecuación de costos sea negativa", advirtió.
Desbalance
En cuanto a los insumos importados, explicó que "no tenemos desabastecimiento, lo que sí nos afecta es la suba de los precios porque muchos insumos en lugar de importarlos al valor del dólar oficial lo hacen a valor del dólar blue. Estamos afrontando una suba importante de los precios que indudablemente afecta en la estructura de costos", detalló.
También deslizó que "la energía en los últimos meses experimentó un incremento del 80 %, lo que produjo cierto malestar en algunos empresarios madereros. Hace varios meses que estamos pagando estos valores; a nivel de estructura de costos de un 4 % pasó a un ocho o nueve por ciento, o sea que si bien el aumento neto es significativo a nivel estructura no es tan influyente, pero no deja de ser un aumento importante", describió.
Entre los factores que inciden en la estructura de costos enumeró a "la materia prima y los sueldos y de estos últimos hay aumento todos los meses, lo que hace que nuestros precios suban: todos los meses se va incrementando y estamos perdiendo una rentabilidad de un 3 %
o 4 % ciento todos los meses", sostuvo.
"Las empresas que exportaban ahora vuelcan sus productos al mercado local, nos vemos obligados a absorber rentabilidad para poder seguir en el mercado; la verdad que el panorama es totalmente incierto", aseguró Falero.
