Médicos, enfermeros, administrativos y otros profesionales de la salud resolvieron hoy intensificar sus reclamos por un aumento salarial en Corrientes, como consecuencia de la alta inflación que deteriora sus ingresos.
La decisión fue tomada este martes por la mañana en una asamblea que realizó la Asociación de Profesionales de la Salud de Corrientes (Asprosac) en las instalaciones del hospital Llano.
Allí, los trabajadores de los hospitales resolvieron reiterar por nota ante el Ministerio de Salud de la Provincia un pedido de reapertura del diálogo para insistir con una mejora salarial.
En caso de no obtener una respuesta favorable por parte del ministro Ricardo Cardozo, definirán medidas de fuerza que podrían paralizar las actividades en los hospitales públicos.
Los trabajadores y profesionales de la sanidad tienen salarios que van de 12 mil a 17 mil pesos, incluido el plus salarial que perciben en negro ($3.550), por lo que consideran que están muy por debajo del costo actual de una canasta básica total que asciende a casi 19 mil pesos. De hecho, hay profesionales de la salud recientemente jubilados que perciben 17 mil pesos en mano, con más de 30 años de antigüedad.
Con una inflación proyectada oficialmente del 27 por ciento anual, los médicos de Corrientes entienden que los aumentos de precios redujeron la capacidad adquisitiva del salario en al menos 1.600 pesos por mes, lo que representa una pérdida de 20.800 pesos si se anualiza el ese monto con el aguinaldo incluido.
La primera cuota del 20 por ciento anual, que el gobernador Gustavo Valdés anunció en marzo pasado, significó 10 por ciento para el sector y ya quedó absorbida por la inflación del primer cuatrimestre del año, que fue del 9,6%. Además, la segunda cuota recién se pagará en julio (5%) y la tercera en octubre (5%).
Por ello, los hospitalarios consideran que, por el momento, los cálculos indican que esa pauta del 20 por ciento anual debe elevarse al 30 por ciento como mínimo; además, se debería adelantar la segunda cuota al mes de junio.
Otra cuestión que genera un gran enojo en los médicos, enfermeros y administrativos es el pago en negro de gran parte del salario, mientras que el monto del básico queda cada vez más abajo.
“¡Aumento del básico y sueldo no menor al costo de la canasta básica familiar ya! ¡Basta de adicionales en negro!”, dice el mensaje que repartieron desde Asprosac.
Además, en otro reclamo particular, sostienen: “Estamos al tanto de que médicos del Servicio de Tocoginecologia del hospital Llano y de la Terapia Intensiva del hospital pediátrico plasmaron en una nota el rechazo a percibir pago de guardias en negro, solicitando que se regularice el sistema de pago de guardias que realmente se hacen a 250 pesos la hora los días entre semana y 340 los fines de semana”.