Desde agua embotellada, golosinas y alimento no perecedero, requiere el cuartel de la ciudad de Corrientes. Es la primera línea de defensa ante los focos ígneos que deben atender, un promedio de 10 por día. Cuando se desató la crisis por los incendios de 2022 hubo campañas nacionales para aportar ante el silencio que mantuvo el gobierno de la provincia.
El comandante jefe de Bomberos Voluntarios de la ciudad de Corrientes pidió ayer por medios radiales de la capital provincial: agua, caramelos y productos hidratantes. "Los caramelos son esenciales porque ayudan con las sales y la glucosa, sobre todo cuando los bomberos bajan de una intervención. También aceptamos agua saborizada y, en menor medida, medicamentos básicos como paracetamol", indicó.
A su ven reclamó mayor responsabilidad a la comunidad para evitar hacer fuego. “Estamos atendiendo alrededor de diez incendios por día. Es impresionante, no podemos estar en todos lados a la vez”, contó.
El pedio de insumos básicos recuerda a lo ocurrido en el verano de 2022 cuando entre los meses de enero y marzo de ese año en la provincia se quemaron 1.700.000 hectáreas. Hubo, por entonces, colectas nacionales para los bomberos de Corrientes en la televisión nacional ante el silencio que mantuvo aquella vez el gobierno de la provincia,
Durante los últimos días hubo reclamos por parte de intendentes que deben hacer frente a los incendios casi en soledad, y a pesar de que piden ayuda al gobierno provincial, la respuesta tarda en llegar o en otros casos ni siquiera es atendida.
Por ejemplo, en el uso de recursos como motobombas o aviones hidrantes que no se movilizan sin autorización de Corrientes capital. (ver link aparte)
