La falta de alumbrado público prolifera en la ciudad y, a la par, también los reclamos de los vecinos por la ausencia del servicio, tanto en el sector céntrico como en los barrios capitalinos.
Las calles a oscuras son un panorama que se repite y multiplica, lo que genera preocupación por el gran número de hechos delictivos que se registran día a día, especialmente en horas de la noche.
Esta semana, una mujer del barrio Molina Punta expresó en redes que frente a su casa, en la intersección de las calles Margaritas y Carlos Lamas, dos postes de luz se encontraban sin funcionar hace más de seis meses.
Además indicó que la delegada del barrio no hizo caso del pedido para restablecer el servicio en todo ese tiempo.
Recién a partir de su reclamo público en Facebook logró que operarios de la Municipalidad de Corrientes realizaran el trabajo y la luz volviera frente a su hogar.
En el mismo barrio, la situación se reitera: en la esquina de las calles Antonio Ballerini y Pasionaria, los ciudadanos reclamaron el servicio de luz en la vía pública hace un año, y hasta el momento no obtuvieron novedades.
En las 322 Viviendas del barrio Laguna Seca, un grupo de vecinos preocupados elevó quejas por la falta de luz en la zona peatonal desde diciembre.
Además informaron que, por la oscuridad y el estado del pavimento, se han caído personas ancianas.
El centro de la ciudad no escapa de la problemática, y áreas muy concurridas, como la avenida Gobernador Ruiz, la plaza 25 de Mayo o el barrio La Rosada, cuentan con poca iluminación en las veredas.
La oscuridad en todos estos lugares se repite y es moneda corriente en el paisaje capitalino.
En paradas de colectivos, donde mucha gente espera hasta altas horas de la noche y temen ser víctimas de robos o asaltos, la falta de luz resulta un factor amenazante. La calle Salta, uno de los corredores más importantes para las líneas de colectivo, sume en la oscuridad a todos los usuarios del transporte público ni bien cae el sol.
En todas estas zonas y otras áreas de la ciudad que sufren el mismo problema, el miedo de los ciudadanos crece frente a la mezcla de oscuridad e inseguridad.