La mayoría de los kioscos o comercios en los que funcionan puntos de carga de crédito exigen entre 10 y 20 pesos extras por operación. El “boleto electrónico” se utiliza en la ciudad desde julio de 2016, desde entonces estas prácticas abusivas son una constante.
El Concejo Deliberante capitalino aprobó ayer la prohibición del cobro de adicionales o “plus” en todos los comercios que proveen el servicio de carga de crédito de la tarjeta del Sistema único de Boleto Electrónico (SUBE) o de saldo telefónico (para llamadas o internet).
La sanción de esta normativa atiende a una propuesta ingresada al legislativo comunal por parte de la Defensoría de los Vecinos hace más de dos años. Es que el cobro de montos extras para brindar ese servicio es una práctica muy común en gran parte de los kioscos que ofrecen esas recargas, muchos exigen cánones de entre 10 y 15 pesos por operación.
En tanto que también hay comercios que no piden el plus, pero sí reclaman la compra de algún producto extra para poder concretar la operación.
“Dicha conducta es considerada una práctica abusiva, contraria al trato digno establecido en el Articulo 8 bis de la Ley 24.240 de Defensa al Consumidor”, especifica la flamante normativa.
“Pueden informar esta conducta comercial desleal, comunicándose al 03794 474903 o al correo electrónico: defensoriadelosvecinosctes@gmail.com”, agrega el texto.
La flamante normativa, también exige que en tales comercios haya carteles que notifiquen a los ocasionales clientes acerca de la prohibición de la aplicación de esos plus, considerándolos una práctica abusiva hacia el cliente. Tanto la Defensoría, como el Ejecutivo Municipal deberán implementar campañas de difusión para que se conozcan los lineamientos de la Ordenanza, con el fin de salvaguardar a los clientes de actitudes abusivas por parte de los kioscos o comercios.
La utilización de la tarjeta SUBE rige en Capital desde julio de 2016, en estos más de cuatro años con “boleto electrónico”, el tema del cobro de plus en las recargas fue una constante. En los comienzos, se exigía un canon de uno o dos pesos, ahora, la cifra oscila entre los 10 y hasta los 20 pesos. Algunos kiosqueros consultados admitieron que la solicitud del plus es para garantizar la continuidad del servicio, habida cuenta que la ganancia por esa prestación es exigua para el comerciante.
¿Controles?
Tiempo atrás, el área de Transporte de la Municipalidad informó que daría de baja a los puntos de recarga en los que se compruebe cobro de sobreprecios a la hora de cargarle crédito a la tarjeta SUBE.
Lo cierto es que más allá de un puñado de inspecciones, nunca se supo a ciencia cierta si es que algún comercios que cobra plus fue sancionado. En pleno centro hay varios kioscos que, con total naturalidad, exigen 10 o 20 pesos extras para concretar la recarga de las tarjetas. Muchas veces, los usuarios aceptan con tal de cargar su plástico cerca de su parada.