El obispo de la Diócesis de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, envió un mensaje a las autoridades civiles y a los integrantes de los comités de crisis o de emergencias de cada localidad, en este tiempo difícil de la pandemia en el que expresa “cercanía, oración y esperanza” ante las circunstancias concretas que atravesamos. “Tomar decisiones por el bien común, nunca fue fácil, menos en tiempos de pandemia” por eso “rezo por ustedes” afirmó nuestro pastor diocesano.
“Hermanos todos de la diócesis de Goya, quiero expresar mi cercanía orante por todos ustedes” pensando en las autoridades civiles y sanitarias, en cada uno de los integrantes de los denominados Comité de Crisis que desde que se inició la Pandemia tienen una tarea impresionante, grande, intensa y difícil” porque tienen que “discernir y tomar decisiones pensando en el bien común: que es el bien de todos” expresó en un video mensaje difundido por las redes sociales desde la página oficial del Obispado.
Animo a pensar en los “más pequeños y más pobres, los humildes, débiles, frágiles y aquellos que son más vulnerables”.
“Tomar decisiones por el bien común, nunca fue fácil, menos en tiempos de pandemia” por eso “rezo por ustedes” y les propuso a cada uno de los integrantes de esos comités, ponerse en oracion.
Monseñor Adolfo Canecin hizo suya la oportunidad para presentar el texto del “Libro de la Sabiduría, capítulo 9 desde el versículo 1 al 11 de la Biblia” cito.
Invito a “rezar juntos, rezar por nuestras autoridades civiles y sanitarias” que deben tomar decisiones “buscando el bien común, atendiendo a la integridad de los aspectos que hacen al bien común” tarea que requiere la asistencia del “Espíritu Santo” pidiendo el “don de sabiduría, que es fruto del Espíritu”.
ORACIÓN
“Dios de los Padres y Señor de la Misericordioso, que hiciste todas las cosas con tu palabra, y con tu Sabiduría formaste al hombre, para que dominara a los seres que tu creaste, para que gobernara al mundo con santidad y justicia e hiciera justicia con rectitud de Espíritu: dame la sabiduría, que comparte tu trono, y no me excluyas del número de tus hijos” expresa el texto.
Continua: “Porque yo soy tu servidor y el hijo de tu servidora, un hombre débil y de vida efímera, de poca capacidad para comprender el derecho y las leyes; y aunque alguien sea perfecto entre los hombres, sin la Sabiduría que proviene de Ti, será tenido por nada”.
Finaliza la oración “Contigo está la Sabiduría, que conoce tus obras y que estaba presente mandamientos cuando tú hacías el mundo; ella sabe lo que es agradable a tus ojos y lo que es conforme a tus mandamientos. Envíala desde los santos cielos, mándala desde tu trono glorioso, para que ella trabaje a mi lado y yo conozca lo que es de tu agrado: así ella, que lo sabe y lo comprende todo, me guiara atinadamente en mis empresas y me protegerá con su gloria” concluye la Palabra de Dios en la Sagradas Escrituras“.
El obispo diocesano, en cada celebración que preside se dirige a la feligresía pidiendo responsabilidad y co responsabilidad, la caridad necesaria, además del máximo respeto a las disposiciones sanitarias, atender con cuidado aquellas situaciones dramáticas que requieren nuestro servicio.
“Hermanos todos, pidamos sabiduría sobre nuestras autoridades civiles y sanitarias, sobre los diferentes comités de crisis o de emergencias, para que puedan discernir y velar por el bien común que es el bien de todos”, reiteró monseñor Adolfo Canecin.
Agradeció a las autoridades, ya mencionadas. Estas semanas han puesto a prueba nuestra presencia significativa en medio del dolor.
El obispo impartió una bendición enviando “un abrazo grande para cada uno de ustedes”.