El diputado peronista Miguel Arias reveló la imagen de la bala que mantiene incrustada en su cuerpo al cumplirse 11 meses del atentado político que sufrió en Tapebicuá, en un caso que sigue impune y con el asesino suelto sin ser citado por la Justicia de Corrientes.
Fue el mayor atentado que sufrió la democracia en la provincia de Corrientes, donde Miguel Arias es actualmente presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados. Tanto el Gobierno radical como la Justicia provincial se llamaron al silencio y el hecho criminal de violencia política continúa impune con un asesino suelto e identificado.
“Cuántas balas más. En esta tomografía de mi abdomen vemos la bala disparada en Tapebicuá el 26 de agosto de 2021. El asesino sigue suelto. Se cumplen hoy 11 meses del atentado. Me pregunto cuántas balas más harán falta para que la Justicia de Corrientes y el Gobierno provincial investiguen la violencia política”. Así se expresó Miguel Arias este martes en sus redes sociales con un video en el que se observa la bala calibre 22.
La bala entró por el abdomen, rozó los órganos más vitales de esa parte del cuerpo y quedó estacionada a medio milímetro de distancia de la columna vertebral, por lo cual el diputado Arias salvó su vida milagrosamente y continúa en buen estado de salud ejerciendo sus funciones.
Luego de permanecer ocho días en terapia intensiva, Arias se retiró caminando del hospital Escuela de Corrientes y retomó sus actividades normalmente.
Mientras tanto, los fiscales de Paso de los Libres, Noelia Lena y Facundo Sotelo, se llamaron al silencio sin siquiera dar explicaciones de por qué no investigan al único sospechoso de haber atacado a Miguel Arias. El asesino sigue suelto en Tapebicuá y la Fiscalía tiene un informe de la Policía federal que lo involucra directamente como el hombre que disparó un rifle calibre 22, a unos 60 metros de distancia, desde la vereda de enfrente. El mismo informe aporta una testigo que presenció el momento.
Al cumplirse 11 meses del hecho criminal, la Justicia provincial de Corrientes sigue sin dar explicaciones de por qué encajonó la causa por este hecho que casi mata al diputado del Frente de Todos y dejó correr la impunidad en el mayor atentado político que sufrió la democracia en la provincia.
