Trabajaba de manera precarizada en el frigorífico del municipio y fue cesanteado por publicar y objetar una errónea denuncia sobre un robo en el lugar donde prestaba servicios. Luis Maidana quedó sin trabajo el pasado viernes cuando al despertar por la mañana, un compañero del frigorífico municipal de Goya, lo anoticio que otra persona había sido tomada para la tarea de sereno nocturno.
Trabajo que hasta ese día cumplió. “No sé si el intendente está al tanto de esto que me pasó. Pero le pido que se ponga la camiseta de intendente y que controle a la gente que pone de jefes, porque maltratan a los trabajadores”.
Maidana percibía $3.700 por semana “en negro”. Así, durante cinco años.
El pasado 20 de enero publicó en su estado de WhatsApp una denuncia sobre el robo en el frigorífico de una tranquera. “Algo que era mentira porque al otro día de que se denunció eso la tranquera estaba en el lugar”, contó este martes.
El caso de Maidana se parece al de Griselda, una empleada municipal de Esquina que por sacarse una foto con el gobernador Gustavo Valdés, fue traslada del puesto de control sanitario municipal donde cumplía funciones.
El caso de Esquina tomó repercusión. Incluso el propio mandatario provincial lamentó el hecho. Se trata de un municipio administrado por el PJ, el de Goya es administrado por la UCR.
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