A todas las Comunidades Cristianas y a la sociedad toda de Goya; quiero por este medio siendo yo parte de la comunidad y de la sociedad, parte de la Vida cristiana goyana , quiero compartirles algunos pensamientos en esta circunstancia en la cual nos encontramos habiendo retrocedido de la fase 5 a la fase 3, por esta circunstancia de público conocimiento.
La primera actitud a la cual me invito y les invito es a tener una profunda confianza, confianza que brota de la Fé en Dios, un Dios que al encarnarse se hizo historia y hecho historia se quedó con nosotros.
Yo estaré siempre con ustedes todos los días hasta que se acabe este mundo, la Palabra de Dios sobre todo en este mes de La Biblia nos recuerda expresiones como... si Dios está con nosotros: quién podrá estar contra nuestra? en todo vencemos fácilmente por aquel que nos amó. La palabra de Dios nos insiste si dos en la tierra se ponen de acuerdo y piden algo al Padre ... mi Padre le concederá, pidan y se les dará, golpeen y se les abrirá; por lo tanto hermanos les invito a tener una actitud de confianza traducida en oración, cada uno desde la Fe que profesa, desde la actitud con la cual se vincula a la trascendencia, procure hablar con Dios, pedir a Dios por la humanidad toda y dentro de la humanidad por nuestra Patria, por nuestro Nordeste Argentino, por nuestra Provincia, por nuestro Departamento y Ciudad. Ahora bien, para que la confianza sea auténticamente Cristiana y Evangélica tiene que ir de la mano a una doble actitud: la responsabilidad personal y la corresponsabilidad en relación con la sociedad toda.
Y una tercera actitud la de la solidaridad, la responsabilidad: saber qué somos partes de un cuerpo y dice la Biblia cuando un miembro sufre todos sufren con él, por lo tanto tenemos que poder sufrir con los que hoy están sufriendo, padeciendo o la enfermedad del coronavirus y haciendo estudios en previsión a estar o no afectados por el virus y a toda la familia de las personas enfermas, pero también una actitud de responsabilidad y de cercanía con toda la sociedad, con todas las personas, y allí es de donde brota la corresponsabilidad, somos parte de un cuerpo. Dice San Pablo: cuando un miembro del cuerpo se alegra todos se alegran con él, cuando un miembro sufre todos sufren con él, por lo tanto una actitud de corresponsabilidad social, la confianza pidiendo a Dios nos cuide nos guarde nos proteja nos libre: no anula la responsabilidad personal sino que todo lo contrario potencia, acrecienta, hace real la responsabilidad en seguir poniendo de nuestra parte todo lo que se nos sugiere desde el comité de crisis para cuidarnos y cuidar a nuestra familia lo más cercanos y cuidar a toda la sociedad.
La corresponsabilidad, por lo tanto: que lindo que todos podamos madurar y crecer en esta actitud.
Esta actitud, que también tiene que ver con la responsabilidad, con la corresponsabilidad y expresión de que la confianza es auténtica: es la actitud de la solidaridad, tomando palabras del Papa Francisco: tenemos el mismo origen, que hemos salido todos de Dios según la santa Biblia, tenemos una misma casa común, el planeta Tierra "Ñanderoga guazú" la casa de todos, la casa es común, es de la familia humana y tenemos un mismo destino común en Cristo muerto, Resucitado vencedor de la muerte y del pecado: en la casa de mi Padre hay muchas habitaciones: por lo tanto esto tiene que impulsarnos a la solidaridad, hacernos uno con el otro, poder reír con el que ríe, pero también llorar con el que llora, sufrir con el que sufre.
Por lo tanto una actitud de profunda solidaridad entre las personas, las familias y toda la sociedad, entre todas las instituciones: que nos lleve a superar grietas si es que huviera dentro de nuestra sociedad, dentro de nuestras Comunidades, dentro de nuestras familias, una profunda solidaridad; tomando palabras del Papa: de esta pandemia no se sale Igual, o se sale mejor si ejercitamos la confianza la responsabilidad, corresponsabilidad y la solidaridad tenemos la posibilidad de salir mejor para encarar la post pandemia, o se sale peor: de lo que ya estábamos y termina afectando a todos, no se sale Igual, se sale mejor o peor, que lindo que ejercitemos entonces está triple altitud de confianza traducida en actitud Orante personal y comunitaria por la familia humana y dentro de ella por nuestra Provincia, y de manera particular con nuestro Departamento hoy en la circunstancia que se encuentra, una actitud de profunda responsabilidad y corresponsabilidad y una actitud de profunda solidaridad.
Bien que estos pensamientos nos ayuden a todos a poder vivir estos días, con profunda paz, con profunda serenidad y quiero impartir la Bendición sobre todo el departamento de Goya, toda la Provincia de Corrientes, sobre todo el País, el Continente, el mundo entero, sobre cada persona, sobre cada familia, sobre cada una de las instituciones, sobre todo los que tienen a su cargo los servicios esenciales, recordando que la dimensión religiosa es también un servicio esencial.
En la iglesia y desde la iglesia a la sociedad y a la humanidad, está dentro de varios servicios esenciales, por qué el ser humano es esencialmente religioso, sobre todos! para que tengamos paz, serenidad, alegría, gozo, para que tengamos profunda confianza orante; responsabilidad corresponsabilidad y solidaridad.
Nos bendiga nuestro Dios: el Padre , el Hijo y el Espíritu Santo ... Amén.
Que la Virgen del Rosario: Patrona de la Ciudad de Goya .... Que la Virgen de Itatí : Patrona de Corrientes y de todo el Nordeste Argentino ...interceda por todos, nos cuide a cada uno de nosotros!
Un abrazo grande para todos!
Padre Obispo Adolfo Canecín
Obispo de la Diócesis de Goya.