El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecin, acompaño a la comunidad de San Francisco de Asis, en el dia de su santo patrono animando a la feligresía de imitar la vida de este santo que “dejo a Dios ser Dios” en su vida, remarcando el “despojo” para encontrar la plenitud de la vida en la santidad.
Monseñor Adolfo Canecin comenzó su homilía destacando la significación de esta celebración en el día domingo “el Dia del Señor” y en ese sentido animo a “contagiar esa celebración del domingo a celebrar el Dia del Señor” porque celebramos a “Cristo que ha resucitado y al resucitar vence la muerte y el pecado”.
“La santidad no pasa por eso nosotros celebramos hoy a San Francisco y, celebrar a este santo, es celebrar la obra que hay en él y a través de él, porque Dios nos hace santos es Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. Celebrar la santidad es celebrar la obra de Dios en una persona” remarcó el obispo al recordar la vida de San Francisco de Asis.
Aprovecho para destacar que “los jóvenes en estos días están vibrando” porque el 10 de octubre el Papa Francisco beatificara Carlo Acuti, que con solo 15 años alcanzo ser beato, se enfermo de leucemia y murió, relato.
Emocionado dijo que “al abrir su tumba su cuerpo esta incorrupto e intacto. Un adolescente, cibernauta en las redes, amante de Jesús Eucaristía, todos los días iba a la Misa, todos los días rezaba el Santo Rosario, con cosas muy bonita”.
“¡Que lindo la santidad no pasa. La santidad permanece y, no es cuestión del pasado es cuestión de hoy, es cuestión de siempre en la cual estamos llamados todos los seres humanos, mas aun, todos los cristianos”, sostuvo.
Exclamo luego “sean santos porque Dios es santo, sean perfectos porque Dios es perfecto” y explico que “nuestro mérito es vaciarnos de nosotros mismos” porque “esa es la pobreza al despojarnos de nuestro propio yo. Vaciarnos de nosotros mismos y desatar las manos de Ñande Yara (nuestro Dios en guarani) para que se haga en cada uno de nosotros lo que el Padre ha soñado desde toda la eternidad”.
“El Padre tiene un plan, sueño y proyecto para cada uno y, Dios plasmo en San Francisco ese plan y ese proyecto” porque mucha era “la corrupción que había en esa época en la sociedad y dentro de la propia Iglesia, muchos escándalos” revelo e insistió “siempre hubo hay, habrá desafíos y escándalos en la sociedad y, en el ámbito Iglesia, porque la formamos los seres humanos, débiles, frágiles y pecadores, por eso, Dios suscita la santidad”.
“¡Los santos son la respuesta de Dios a los desafíos de la realidad en la sociedad y en la Iglesia!” resalto con enfasis.
“Francisco de Asís permitió que Dios haga en el su obra, por eso, el eligió la amada hermana pobreza, que significa despojarse de todo. Solo quien es pobre, no solo pobreza sociológica sino vaciarse del propio yo” planteo el obispo goyano.
Dijo mas adelante que “Francisco se vacío, esa fue la pobreza de él y Dios pudo hacer en Francisco maravillas. Dios pudo hacer en el la obra de Dios. Celebramos la obra de Dios en un hombre que trascendió la geografía y los siglos, llego al mundo entero. Hoy en el mundo entero hacemos memoria de la obra de Dios en una persona y por eso, es reconocido por todo el pueblo. En Asís, vivió un hombre que les dejo a Dios ser Dios.
Animo que “si nosotros llegamos a la santidad nuestra vida tendrá sentido. La vida se nos dio para ser santos y es la plenitud. No llegar a la santidad es no haber descubierto el sentido de la vida, es triste y es la mediocridad, por eso, tenemos que aspirar a la santidad, a la perfección y a la plenitud que Dios quiso y quiere, no por nuestras fuerzas y méritos, sino permitir a Dios” sostuvo.
Aconsejo descubrir en San Francisco de Asís que “Dios es Padre” porque este santo “experimento la paternidad a la manera de Jesucristo, porque somos Hijos en el Hijo, y esa experiencia fuerte les permitió abrirse a la fraternidad”.