Con la Serenata y la misa a la 0 hora de este 7 de agosto en el Santuario Arquidiocesano, en la localidad de Riachuelo, comenzaron las celebraciones en el día del Patrono del Pan y el Trabajo, San Cayetano, a quien hoy se volverán a elevar las plegarias para pedir o agradecer, por ese medio que dignifica al ser humano y el sustento de la vida, respectivamente.
Con más del 44 por ciento de ciudadanos en la Argentina sumidos en la pobreza, un 10 por ciento en la indigencia y con una tasa de desocupación del 10,2 por ciento en el primer trimestre de este año, las súplicas conllevan situaciones dramáticas de quienes sufren en esa condición, al igual que de los demás, que temen cada día por un panorama complejo a enfrentar, agravada desde 2020 por la irrupción inesperada de la pandemia del Covid-19.
PROGRAMA
Al indicar que por disposición municipal no se permite el acceso de ningún visitante al sector de la localidad donde se encuentra el templo, desde ayer a las 16 hasta mañana a las 20, los devotos que no tienen residencia aquí pueden participar de la programación a través de Facebook: Santuario San Cayetano, o por medio de la radio FM Cura Brochero, en el 107.7 Mhz del dial.
Las celebraciones, que comenzaron en la primera hora de este sábado con la Serenata de saludo al venerado Santo y la primera misa, continuarán hoy, a las 8, con la misa por la comunidad; a las 9.30 será la misa en honor a San Cayetano y a las 11, la tradicional misa por los trabajadores, que por segundo año consecutivo por la situación epidmeiológica no será multitudinaria ni tampoco se realiza la Peregrinación de los Trabajadores, en la que el propio arzobispo, monseñor Andrés Stanovnik participaba.
Las actividades se reanudarán a las 15 con una recorrida de la imagen del Patrono por las calles de la zona.
A las 17, se oficiará la misa en acción de gracias por los 14 años de la elevación al rango de Santuario del templo parroquial; a las 18, sorteo del bono contribución y a las 20, la misa de clausura.
SON ROSTROS, NO NÚMEROS
La Iglesia siempre en el silencio de su servicio invaluable desde el nacimiento de la Nación, pese a que algunos de sus miembros no siempre actuaron con el mérito virtuoso exigido por la Fe cristiana, lleva a cabo también una tarea de fuerte promoción social, además de la espiritual y caridad que le es propia y conocidas por todos, como lo hace a través de su organización Cáritas.
Cabe mencionar en esta fecha especial del Santo del Pan y el Trabajo, que el miércoles 9 de junio último se presentó el informe «Un rostro detrás de cada número. Radiografía de la pobreza en la Argentina», que refleja un análisis exhaustivo de la grave situación social que atraviesa el país y las políticas sociales desplegadas para atender la emergencia. La presentación tuvo lugar en el contexto del lanzamiento de la Colecta Anual de Cáritas que se realizó ese mes, a la cual sin embargo se puede aportar durante todo el año.
«La pandemia puso a millones de familias argentinas en una situación dramática, al agravar de modo significativo las difíciles condiciones que ya enfrentaban. Esta situación requirió de un notable esfuerzo de coordinación y logístico, para llevar atención material y contención espiritual a los argentinos más necesitados», resumió hace apenas casi dos meses monseñor Carlos Tissera, presidente de Cáritas Argentina.
El 26 de agosto, Día de la Solidaridad, es la fecha en la que Cáritas Argentina da a conocer el número final de lo recaudado en cada Colecta anual, organización que cuenta con el mayor prestigio en el país por su transparencia en el destino de lo recaudado que beneficia a miles de familias y comunidades enteras.