Fabricar más armas y fabricarlas más rápido. Ese es el objetivo que se ha propuesto el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius , a escala europea. Para ello convocó anoche en Berlín a sus homólogos de Francia, Reino Unido, Polonia e Italia, que juntos representan dos tercios del gasto en seguridad de Europa. Hablaron de cómo adaptarse al cambio geopolítico que supone para los europeos la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y de las formas concretas en las que capacitar a la UE para hacerse cargo de su propia defensa. «Vamos a incrementar nuestra coalición para el desarrollo y la adquisición de drones con inteligencia artificial», además de «la adquisición» y «producción de munición», adelantó Pistorius tras la reunión. Insistió en que «las lagunas en seguridad en Europa deben cerrarse con mayor gasto en Defensa». «Los presupuestos de defensa van a aumentar a 2 %, 2,5 % y 3 %. Tenemos que acabar con los agujeros en materia de capacidad militar», sentenció, tras una reunión en la que también participó por videoconferencia el ministro de Defensa de Ucrania, Rustem Umérov .Pistorius sabe, en todo caso, que el reto no es afrontable sin la industria europea de fabricación de armamento, que por su parte está poniendo también los medios para alcanzar el mismo objetivo. Sus responsables están manteniendo ya discretos encuentros para explorar vías de colaboración.Noticia Relacionada estandar Si El flanco oriental de la OTAN se prepara para la guerra Rosalía Sánchez La Alianza teme que las estructuras de comunicación saboteadas sean responsabilidad de Rusia de cara a un escenario bélico Representantes de las principales empresas de defensa europeas han discutido recientemente el asunto en una reunión celebrada a bordo del portaaviones HMS Queen Elizabeth, en Hamburgo, según ha publicado \'Frankfurter Allgemeine\'. La base para una cooperación europea más estrecha es el «Acuerdo Trinity House» firmado recientemente por el ministro alemán Pistorius y por el británico John Healey . En el acuerdo ya se mencionan específicamente algunos proyectos, como la inversión en una fábrica de cañones de artillería Rheinmetall en Gran Bretaña y la cooperación en el futuro desarrollo del tanque con ruedas Boxer. Está prevista la cooperación entre fuerzas navales y también se menciona la protección de infraestructuras submarinas críticas. Aún es necesario desarrollar proyectos concretos de faros. Tanto estados como empresas intentan optimizar el rendimiento de las inversiones en armamento.Los presupuestos de Defensa europeos ascenderán este año a 436.000 millones de dólares, según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS). Sólo en Alemania, el gasto ha aumentado un 80% en los últimos diez años. Alcanzar el objetivo del 3% del PIB representaría otros 280.000 millones de dólares más en gasto militar en Europa cada año. « Donald Trump vendrá a la cumbre de la OTAN en junio y dirá: Europa debe gastar el tres por ciento de su producción económica en defensa. Y esta vez hablará en serio«, avanza Ben Schreer , jefe de la oficina europea del IISS. Por eso es necesario que los sectores nacionales del armamento europeo funcionen en coordinación y no haciéndose la competencia entre ellos, como es el caso desde 2010 del sector británico. Mientras Alemania desarrolla el Future Combat Air System (FCAS) junto con Francia y España, Gran Bretaña fundó el Global Combat Air Program (GCAP) con Italia y Japón. El ministro alemán promueve ahora vías de cooperación entre estos dos ámbitos, con posibles y valiosos intercambios de información y repartición de proyectos, de manera que todos ganen.La estrategia ha recibido una buena acogida, tanto por parte de los gobiernos como de las empresas. El principal e inesperado obstáculo que ha aparecido es la crisis del Gobierno alemán y las elecciones anticipadas que no se celebrarán hasta el 23 de febrero. Pistorius, que corre un serio riesgo de abandonar la cartera de Defensa, está acelerando los procesos cuanto puede, pero sus homólogos no saben con qué se encontrarán a la vuelta de elecciones y esa incertidumbre ralentiza los acuerdos. El Canciller Olaf Scholz , por ejemplo, anunció en junio la compra de 20 aviones de combate Eurofighter, pero aún no se ha realizado el pedido de miles de millones al consorcio liderado por Airbus y nadie espera ya que llegue antes de las elecciones, lo que reorienta la actividad de fabricantes y sus proveedores. «Las elecciones federales retrasarán un poco las cosas», ha reconocido Maria Eagle , responsable de adquisiciones del Ministerio de Defensa británico. «Por supuesto que podemos aumentar la producción, pero eso requiere una demanda predecible que todavía no tenemos«, ha declarado el jefe de Airbus, Guillaume Faury .La intención de Pistorius, sin embargo, es firme y trasciende su oficina. «Necesitamos capacidades que todavía no tenemos, de manera que estemos seguros de que podemos contar con lo que necesitamos: una disuasión eficaz», ha subrayado la importancia de los objetivos, «queremos procurarnos sistemas de largo alcance en aire, y sistemas de largo alcance en tierra». El ministro polaco, Władysław Kosiniak-Kamysz , argumenta por su parte que la defensa de «la libertad necesita fuerza». «Hemos reconocido que el gasto en defensa tiene que seguir aumentando en vista de las amenazas globales que siguen creciendo, estamos conectando y acercando nuestras defensas europeas, y estamos asegurando que el Reino Unido sea una parte intrínseca de la defensa europea», ha garantizado titular de Defensa del Reino Unido, John Healey . En la misma línea, la subsecretaria del Ministerio de Defensa de Italia, Isabella Rauti , en representación de Guido Crosetto , ha reconocido en Berlín que «Europa tiene que hacer más», mientras que el titular del ramo francés, Sébastien Lecornu , puso de relieve que si bien es relevante ir más allá del 2 % en gasto en defensa, también hay que «saber usar ese dinero de forma razonable» y «alcanzar el 2% como suelo, no como techo».