La Administración Trump retomará las detenciones de familias de inmigrantes con niños pequeños que entren en Estados Unidos de forma irregular, según ha anunciado este 26 de diciembre el nuevo coordinador de política fronteriza, Tom Homan. Esto marca el final de los permisos condicionales de asilo a padres que hayan cruzado irregularmente con menores de edad, una práctica común durante la Administración Biden. Trump no toma posesión del cargo hasta el 20 de enero, pero ya ha formado su equipo y anunciado nuevas políticas.El de los menores inmigrantes no es un problema baladí en EE.UU. Desde 2019, en pleno mandato primero de Trump, unos 450.000 niños sin papeles han pasado en un momento u otro por la custodia del estado federal norteamericano. De ellos, 291.000 han podido permanecer de forma irregular. Otros 32.000 no han comparecido ante los juzgados migratorios, por lo que se les considera desaparecidos, aunque seguramente estén eludiendo la repatriación sin más.Otro cambio en la política fronteriza anunciado por Homan es que a partir de la entrada de Trump en el gobierno, los padres en situación irregular a los que se detenga serán deportados aunque sus hijos menores sean ciudadanos estadounidenses. La Administración Biden renunció a repatriar a padres con hijos nacidos en EE.UU., por motivos de reunificación familiar. El equipo de Trump les dará la opción de salir solos o acompañados de sus hijos, que no perderán la nacionalidad.Noticia Relacionada estandar No El equipo de Trump: Musk, un antivacunas, un comentarista de la Fox, el zar de la frontera y la novia de Moscú ABC Susie Wiles, Robert F. Kennedy, Marco Rubio o Tom Homan; el nuevo gabinete que anuncia el presidente electoFin de la nacionalidad por nacimientoEl presidente electo ha prometido también acabar con la concesión de nacionalidad por nacimiento. EE.UU. es uno de los pocos países en que cualquiera que nazca dentro de sus fronteras obtiene el pasaporte de forma automática, a diferencia de lo que ocurre en España, por ejemplo, donde se requiere que al menos el padre o la madre sean ciudadanos. Es muy complicado para Trump cumplir esa promesa, pues para ello requeriría una reforma de la Constitución y el apoyo de la oposición demócrata.Biden cerró una serie de tres centros de internamiento de familias con unas 3.000 camas combinadas . La Justicia estadounidense no permite que los menores estén bajo custodia del Gobierno estadounidense más de 20 días. Los trámites de repatriación suelen durar mucho más, por lo que esos menores han quedado por lo general en libertad en EE.UU., en la mayoría de casos con los familiares que les han acompañado. En su primer mandato, Trump permitió, aunque brevemente, la separación de familias y el internamiento de niños solos.Separación de menoresEn los cuatro años de Trump, se separó a unos 4.000 niños de sus familiares. Cuando se filtraron unas imágenes de decenas de esos niños solos en unos cuartos que se asemejaban a jaulas, la Casa Blanca mudó su política. Los planes migratorios de Trump quedaron entonces suspendidos por la pandemia, que le permitió al entonces presidente decretar el cierre absoluto de la frontera, algo que Joe Biden mantuvo hasta mitad de su mandato.Recientemente, Biden ha superado a Trump en deportaciones anuales: ha superado las 172.000, una cifra que sólo está por debajo de la de Barack Obama, el presidente que más personas sin papeles ha expulsado de EE.UU.Con Biden, las entradas de personas sin papeles en EE.UU. se han disparado hasta cotas máximas, más de tres millones por año, según cifras oficiales. En meses recientes, el presidente ha acelerado las deportaciones con un complejo sistema de cupos y citas previas. El equipo de Trump se dispone a desmantelarlo para reintroducir un protocolo de devoluciones en caliente a México. Los peticionarios de asilo que quieran presentar sus papeles deberán esperar en ese país hasta que se decida sobre su solicitud, algo que puede demorarse meses, si no años.Trump ha prometido deportaciones masivas en su primer día de presidencia, aunque no está claro cómo eso podrá producirse. El estado de Texas, que tiene el mayor tramo de frontera compartida con México y su propia patrulla fronteriza, le ha brindado su colaboración para ello. Otros estados fronterizos, como California, han anunciado que no cooperarán.No hay una cifra exacta de cuántos inmigrantes sin papeles hay en EE.UU.; se estima desde hace décadas que son al menos 11 millones, pero seguramente sean muchos más. Hay además en torno a cuatro millones de personas que entraron en EE.UU. como menores de edad, los llamados \'dreamers\' o soñadores, a los que Obama prometió nacionalizar, aunque sus casos se han ido demorando por las divisiones políticas. Trump dijo recientemente que se decanta por hacerles ciudadanos ya que su inmensa mayoría han estudiado, trabajado y tienen familia en EE.UU.