Israel regresó a la negociación indirecta con Hamás en Qatar con la difícil tarea de equilibrar su deseo de eliminar a los islamistas de la Franja con la necesidad de liberar a los rehenes. El alto el fuego se mantiene en un limbo desde el final de la primera fase del acuerdo el 1 de marzo y Steve Witkoff , enviado de Donald Trump, llegará a Doha en las próximas horas con el objetivo de «fijar fechas límite» en el proceso, según adelantó en declaraciones a la cadena Fox. Witkoff piensa que «es la única manera de avanzar». De momento, las armas se mantienen calladas e israelíes y palestinos están pendientes de los movimientos de la Casa Blanca.Benjamín Netanyahu , que tiene la doble presión de las familias para seguir negociando y de los ultranacionalistas para volver a la guerra a gran escala, no acepta la retirada de sus tropas, ni el final de la guerra. Los familiares de los rehenes mantienen una acampada frente al ministerio de Defensa en Tel Aviv para pedir que se respete el acuerdo que permita el regreso seguro de los suyos a casa. La delegación israelí en Doha sabe que Washington ha mantenido contacto directo con Hamás para tratar la liberación del rehén estadounidense israelí Edan Alexander y la entrega de los cuerpos de otros cuatro rehenes con doble pasaporte. Un contacto sin precedentes que se ha realizado a espaldas de Netanyahu, según los medios israelíes. \'Al-Araby Al-Jadeed\' reveló que en los contactos con los estadounidenses el futuro de las armas de Hamás fue también un tema clave. Según este medio de Qatar, los islamistas habrían propuesto un alto el fuego que dure al menos 10 años a cambio de sus «armas ofensivas y cohetes» y para ello exigen a Washington garantías sobre la retirada militar del enemigo. Según este medio, Hamás ofreció liberar a Edan Alexander como «gesto de buena voluntad» para mantener abiertas las negociaciones directas con el equipo de Trump.Noticia Relacionada «Es el primero de muchos» estandar Si Mahmoud Khalil, primer estudiante propalestino deportado por Trump DAVID ALANDETE | CORRESPONSAL EN WASHINGTONCorte de electricidadTras el final de la primera fase Israel cerró el acceso a toda la ayuda a Gaza y durante el fin de semana ha cortado la electricidad. Los israelíes presionan a Hamás y someten a dos millones de personas a un cerco brutal que recuerda al impuesto durante los 15 meses de guerra. Izzat Al Rishq , dirigente islamista, calificó estas medidas de castigo como «un intento desesperado de presionar a nuestro pueblo y su resistencia mediante tácticas de chantaje baratas e inaceptables».