La UE quiere evitar en Siria los errores de Libia y Afganistán

La nueva alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, la estonia Kaja Kallas , presidió ayer su primer Consejo de ministros de Asuntos Exteriores en el que reconoció que ya ha enviado a un diplomático europeo a Damasco para entrar en contacto con las nuevas autoridades. Muchos países ya han hecho lo mismo, a pesar de que los nuevos dirigentes del país pertenecen a una organización, Tahrir al-Sham (HDS), que figura en la lista de las organizaciones terroristas, en un intento de «no cometer los mismos errores» que en Libia o en Afganistán.El enviado europeo es el jefe de la delegación (embajador) en Beirut que no tiene ninguna otra encomienda ni se puede considerar como un «enviado especial» de la UE. Kallas ha reconocido que en la reunión de ministros han concluido que esta contradicción «es un problema que tienen también todos los actores de la región» y que a pesar de ello todos han enviado representantes a Damasco o incluso algunos como Turquía han vuelto a abrir su embajada. «En la reunión hemos visto que todos los ministros han coincidido en asumir que no queríamos que se repitiesen los mismos errores que se cometieron en Libia o Afganistán» donde la intervención occidental ha sido un fracaso con todas las letras. «Todos queremos estabilidad en Siria para que los refugiados puedan volver a sus casas» es el objetivo primario para la UE en estos momentos. Ya se ha enviado un primer cargamento de ayuda humanitaria y la Alta Representante habló incluso de la idea de celebrar una conferencia en Bruselas para recaudar fondos destinados a la reconstrucción del país, de manera que el proceso de normalización se acelere.«La situación en toda la región es muy compleja –admitió Kallas- y por ahora los contactos son de muy bajo nivel porque queremos ver primero si van en la buena dirección y tenemos que ver avances positivos en el respeto a las minorías».Noticia Relacionada estandar Si Un pequeña Gaza en el corazón de Damasco Mikel Ayestaran «Yo creo que estamos peor incluso que en Gaza porque todo el mundo se ha olvidado de nosotros»El ministro holandés fue de los pocos que se refirió a la necesidad de que Rusia retire su presencia militar de Siria, o más bien que sea expulsada por las nuevas autoridades, antes de pensar en ninguna normalización, pero por el momento, la mirada europea hacia Rusia tiene otro objetivo y es primero la situación en la guerra de Ucrania y desde hace unas semanas la crisis política en Georgia que son dos países que históricamente han estado en la órbita de Moscú pero que intentan conectarse con Occidente.Respecto a la invasión rusa de Ucrania , Kallas ha tenido que frenar muchas energías que le llegan por distintos países y que prevén que con la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca Estados Unidos va a cortar su ayuda militar a Ucrania y que por tanto sería el momento de aceptar emprender negociaciones para detener la guerra. Algunos países, como Francia, habían hablado de transformar ese movimiento que revelaría la debilidad de Europa en una señal de fortaleza aceptando el envío de tropas europeas para mantener la línea del frente. Para Kallas «para poder hablar de una fuerza de mantenimiento de la paz tiene que haber primer paz y, sinceramente, yo no veo que ahora mismo Rusia quiera la paz».En cuanto a Georgia , los ministros han decidido suspender el acuerdo de liberalización de visados para funcionarios que estaba a punto de firmarse, como respuesta a la intervención del Goberno prorruso, instalado después de unas elecciones dudosas, de imponer también un presidente de la República favorable a Moscú. No se ha podido aprobar ningún tipo de sanciones contra los responsables de abusos contra los derechos humanos y de la represión contra manifestantes precisamente porque se requiere unanimidad y el Gobierno de Hungría lo vetó. «La lista de sanciones ya se ha propuesto, así que estamos debatiéndola, pero todo el mundo tiene que estar de acuerdo, y aún no estamos ahí, así que veamos si vamos a llegar ahí», declaró la política estonia. Sin embargo, por lo que se refiere a la toma de posesión del presidente prorruso, Kallas lanzó un mensaje un poco críptico al recordar que «la actual presidenta estará en el cargo hasta el 29 de diciembre y mucho puede pasar hasta entonces».