Las declaraciones del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump , advirtiendo a España de que le aplicará un « arancel del cien por cien » a las importaciones mantienen en vela a los empresarios potencialmente afectados por esa decisión, aunque insisten en mantener la calma a la espera de que la Casa Blanca materialice el anuncio a preguntas de ABC. No es la primera vez que Trump avisa de este tipo de medidas -ya ocurrió en su primer mandato con tasas a alimentos y otros productos-, por lo que el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha querido quitar hierro: «No me encontrarán especulando de ninguna medida hasta que no haya una confirmación oficial», se pronunció ayer desde Bruselas. El ministro subrayó que la prioridad del Gobierno es reforzar el vínculo transatlántico y recordó que la relación comercial bilateral ha ascendido a 43.000 millones de euros en 2024 y que ésta además arroja un saldo a favor de Estados Unidos de unos 10.000 millones de euros. «Somos muy conscientes de la relevancia de esta relación comercial», dijo el ministro, quien recalcó que EE.UU. es el primer inversor en España y es, además, el primer destino de la inversión española.En esa misma línea se ha pronunciado el Club de Exportadores, porque «las compras que nos realiza EE.UU. no cesan de disminuir mientras que las exportaciones a España siguen creciendo». Además, indica que «sería ilegal según la normativa de la Organización Mundial del Comercio (OMC) ».Tensa calmaLa tensa calma también se revela en la reacción de Jaime Malet, presidente de la Cámara de Comercio de EE.UU. en España, y uno de los pocos empresarios españoles en el Capitolio el día de la proclamación. Para Malet, las palabras de Trump no revisten gravedad. «Dudo que pongan un arancel del 100% porque también sería muy malo para la propia economía norteamericana», indica el empresario.Por su parte, los agricultores del olivar -uno de los sectores potencialmente más afectados- asumen que Trump «es impredecible», según COAG. Esta organización prefiere no ponerse «la venda antes que la herida» y sí esperar a que Washington materialice las los anuncios realizados.